Sorogain, ubicado en el Valle de Erro, es un paraje natural de extraordinaria belleza en la Navarra pirenaica, ideal para aquellos que buscan conectar con la naturaleza en un entorno tranquilo y rodeado de frondosos bosques.
Este enclave es conocido por su historia, biodiversidad y su importancia como lugar de tránsito entre España y Francia, siendo antaño un área de pasto compartido por ganaderos de ambos lados de la frontera. Actualmente, se ha convertido en un espacio para el turismo rural y el disfrute de actividades al aire libre.
Uno de los mayores atractivos de Sorogain es su privilegiado entorno natural, cubierto por bosques de hayas y robles que invitan al senderismo y paseos tranquilos en medio de la naturaleza.
Estos bosques ofrecen al visitante la posibilidad de recorrer rutas marcadas que serpentean entre árboles centenarios y amplios prados, brindando espectaculares vistas del paisaje pirenaico. La fauna y flora del lugar también son un atractivo especial, con la posibilidad de avistar especies como ciervos, corzos o aves rapaces que habitan la zona.
El Valle de Sorogain cuenta con una historia rica, siendo un punto estratégico en la ruta jacobea, pues parte del Camino de Santiago atraviesa el valle. En el pasado, el valle fue una zona de paso entre los ganaderos del Valle de Erro y las tierras francesas, donde ambos compartían el pastoreo de los prados, lo que se conoce como el tratado de facería.
Este acuerdo, que aún está en vigor en algunos casos, marcó las relaciones entre las comunidades fronterizas, fomentando la cooperación y el respeto por los recursos naturales.
Uno de los puntos de referencia más importantes del valle es el Albergue de Sorogain, un refugio rural que se encuentra en plena naturaleza y que, a lo largo de los años, ha sido un lugar clave para los peregrinos y excursionistas que buscan descansar en un entorno acogedor y familiar.
Este albergue no solo ofrece servicios de hospedaje, sino que también es un lugar ideal para degustar la cocina local, basada en productos de la tierra como el cordero, la ternera y las setas que se encuentran en los bosques cercanos.
Sorogain también se ha convertido en un destino perfecto para los amantes del senderismo y las actividades al aire libre. Desde el valle, parten numerosas rutas, algunas de ellas sencillas y accesibles para familias, mientras que otras ofrecen un mayor desafío, perfectas para excursionistas experimentados.
Entre las más populares se encuentra la ruta hacia Lindus, que regala impresionantes vistas panorámicas de los Pirineos. Durante la temporada de otoño, el valle adquiere una atmósfera mágica, ya que el colorido de los árboles cambia a tonos ocres y dorados, convirtiendo Sorogain en uno de los lugares más fotogénicos de la región.
Además, es un buen momento para disfrutar de la recolección de setas, una actividad muy popular en la zona, donde tanto aficionados como expertos se acercan a los bosques para buscar hongos y otras especies de la rica micología local.
Para los que deseen prolongar su estancia en la región, el Valle de Erro y sus alrededores cuentan con una amplia oferta de casas rurales y alojamientos que permiten descubrir otros puntos de interés cercanos, como los pueblos tradicionales de la zona.
En definitiva, Sorogain es un destino imprescindible para los amantes de la naturaleza, la historia y el turismo rural. Un lugar donde cada rincón cuenta una historia, y donde el entorno invita a la reflexión, la aventura y el disfrute de la vida sencilla en plena naturaleza navarra.
