El ciclista de 88 años fallecido este sábado al ser atropellado por una furgoneta en la carretera Z-5303, en el término municipal de Tarazona, es un conocido escritor navarro. El siniestro se ha producido hacia las 11.55 horas en el kilómetro 10,5, a la altura de Santa Cruz de Moncayo, una vía de montaña muy frecuentada por ciclistas. Según testigos, el atropello ha ocurrido en una curva. Especialistas de Tráfico se han desplazado al lugar para investigar las causas.
La víctima es Alfonso Verdoy Blanco, un conocido profesor, escritor y figura cultural muy apreciada en Tudela. Su muerte ha causado un hondo pesar en la ciudad y entre quienes compartieron con él décadas de actividad intelectual, docente y artística.
No en vano, el alcalde de la capital Ribera, Alejandro Toquero le ha despedido con un mensaje público en el que ha destacado su huella humana y cultural: "Con todo el dolor de nuestro corazón despedimos al escritor y profesor Alfonso Verdoy (...). Una vida dedicada a potenciar, defender y poner en el mapa la ciudad que amaba a través del cine, la cultura y la tauromaquia".
Alfonso Verdoy nació en Madrid en 1937 y se trasladó a Tudela con cuatro años, donde creció y formó su vida. Estudió Magisterio y más tarde cursó Filosofía y Letras en Barcelona. Tras su regreso a Navarra, dio clases en los Jesuitas y posteriormente en la ETI de Tudela, donde fue jefe del departamento de Filosofía hasta su jubilación en 2001. Por sus aulas pasaron generaciones de estudiantes que lo recuerdan por su cercanía y su carácter humanista.
Su aportación a la cultura tudelana fue amplia y constante. Desde 1956 colaboraba con la revista La Voz de la Ribera, una relación que recogió en 2011 en el libro Frente al Espejo. También integró desde 1967 el Cine Club Muskaria, del que fue miembro destacado y para el que dirigió cortometrajes y largometrajes en súper 8, algunos reconocidos en certámenes nacionales. En los últimos años, diversas entidades culturales le rindieron homenajes por su trayectoria.
Los toros siempre formaron parte de sus pasiones. En octubre de este año presentó su último libro, El toreo: Arte y Mito, en el que reflexionaba sobre la tauromaquia como lenguaje cultural y simbólico. Defendía que en el ruedo se cruzan la estética, la ética y la memoria, una mirada que marcó también su pensamiento filosófico.
Además de su actividad docente y literaria, Verdoy participó en múltiples proyectos locales relacionados con el teatro, la divulgación histórica y la vida cultural. En 2024 recibió el mandil de honor de la Real Sociedad Gastronómica Intemperie por su contribución a la promoción de Tudela y su comarca.
Alfonso Verdoy estaba casado con Gloria Berástegui y tenía tres hijas: Ana, Gloria y Loia. Quienes lo conocieron recuerdan su discreción, su generosidad intelectual y una curiosidad que lo acompañó durante toda su vida.