- martes, 17 de junio de 2025
- Actualizado 17:08
El otro día Pere habló de la vida vivida y la vida pensada y llevo toda la semana dándole vueltas a esa diferencia entre lo que vivimos y lo que queremos vivir. La vida pintada sería la mezcla, lo que creemos vivir.
¿Ustedes, amados lectores, creen que es casual que Euskadistán tenga los niveles más bajos de natalidad de toda Europa? Qué va... follar es de fachas.
Igualar en inferioridad un 2-0 al Sevilla solo está al alcance de una casta especial de equipos; por eso, y por tantas cosas más, la derrota dolió como la que más en una melé durante la prolongación.
Esta era la frase con la que cerrábamos las conversaciones cuando analizábamos algún proceso operacional, si eran profesionales, o cuando comentábamos algún chascarrillo, sobre todo de relaciones personales.
La foto es real. Un vendedor ambulante de gallinas con el pescuezo retorcido y aún sin desplumar mirando a cámara sin mirar, curioso pero no cotilla.
Hasta el tiempo de descuento, con un cabezazo dormido, no disparó Osasuna entre los trespalos. El Granada le dio un repaso en toda regla. Obtuvo un marcador escaso.
“El Coletas come lubina y los agricultores en la ruina”. Eso decía una pancarta e una de las manifestaciones de agricultores de esta semana. Cada uno ejerce la presión como puede, lo malo es confundir las responsabilidades, ¿no creen?
Doce o catorce días después, ya he perdido la cuenta, seguimos en el mismo punto. Miles de toneladas de residuos altamente tóxicos descontrolados, dos trabajadores desaparecidos y un cargamento de preguntas que nadie desde el PNV quiere responder.
Temporada prácticamente hecha. Los tres puntos dejan la permanencia al alcance de la mano, pero la victoria en San Mamés no será tan recordada por los puntos como por el escenario de la victoria. De nuevo, y ya había llovido, el equipo navarro enmudeció al de Bilbao.
Sí, ese invento tan sencillo que se pone en el parabrisas y abre la barrera de la autopista y los parkings sin tener que parar. No lo llamaría ya innovación, pero es que a veces ni para eso estamos preparados.
Hoy es el santito del amor. Ah, el amor. Love is all around... hasta el aburrimiento. Ojalá hubiera sido la original de los Troggs y no la versión de Wet, Wet, Wet la que perdurara, pero ni en eso tenemos suerte.
Derrota de guante blanco. Inapelable. El Madrid evidenció su diferencia de potencial, mientras la entrega rojilla hizo cuanto pudo.
Dice la RAE que referente es el término modélico de referencia. Es decir, el espejo en el que mirarse, la inspiración, lo que nos marca el camino. Aparentemente van cambiando según pasa el tiempo, lo que no es tan cambiante es su repercusión.
Y allí se plantaron, con el rótulo de la institución que dicen que es fascista detrás, a decirnos que ellos solo quieren derribarlo todo porque aquí no hay libertad y todo es opresión.
Osasuna compitió, creó peligro, y hasta pudo lograr algo positivo, realidades que no refleja el excesivo marcador (3-1) encajado en tierras castellonenses.
La muerte de Kobe Bryant y la alerta por el coronavirus han puesto esta semana la muerte otra vez en los titulares. Ese miedo irracional que nos entra cuando la muerte sacude pero, ¿es el hecho de morir o lo impredecible de la muerte lo que nos inquieta?
No es cuestión de que segundas partes nunca sean buenas, sino más bien de tener la motivación suficiente para intentarlo de nuevo, porque casi nunca es verdad que nos enfrentemos a lo mismo dos veces. La situación y nosotros mismos hemos cambiado. Lo que hacen falta son razones. Y esperanza.
La lectura del partido resulta sencilla: Osasuna tiró dos veces entre los tres palos y anotó sendos goles. El Levante no disparó ninguna y se fue de vacío, lógico. Además, doble postdata.
El Parlamento, hogar de la soberanía popular navarra, es un lugar en el que la palabra cobra una gran relevancia. Pero, ¿son aquellas personas que trabajan en él o simplemente participan en sus debates conscientes de ello? Les ahorro el tiempo de reflexión: no.
Parece como si a Osasuna le han cogido la medida. El Valladolid supo jugarle con relativa facilidad. Salió un partido tan igualado como plano. Resultan más interesantes algunos de los últimos movimientos del ‘factotum’.
En España somos muy de las formas y muy poco de los fondos.
Cerramos el año, otra vez, esta vez también década. Parece que esto le da más importancia al cierre, como de acabose total. Pero la realidad es más simple, el primer día del año solo será el día siguiente a otro. Habrá que seguir intentándolo, con el año no se acaba nada. Ojalá fuera así a veces.
Pesaron demasiado los tres goles donostiarras sin cumplirse la media hora. Sin embargo, la personalidad del equipo estuvo a punto de dar la vuelta a un partido imposible. Despedida de año agridulce en El Sadar.
No hace falta que nos contemos todo. Estoy por sacar una línea de camisetas con la frase, o tatuármelo en la frente. Qué necesidad de ir por la vida de sinceros, que no, que la verdad muchas veces no es la misma. Basta de confundir sinceridad con necesidad de autoafirmarse.
Osasuna combatió hasta el final, también compitió, e incluso dejó buena imagen, pero en el Metropolitano se impuso la lógica. Solo el fichaje de Morata costó más que el pago anual de la plantilla rojilla. Y por otros ha pagado tres veces más.
El Sevilla se dejó dos puntos. Primero pudo pero no quiso, después quiso pero no pudo. Enfrente tuvo a un Osasuna que hasta con uno menos suma en el césped y en la grada.
Lo recordarán seguro, sé que lo cito con frecuencia... El ligre, mitad león, mitad tigre.
¿Cuántos socialistas honorables que no querían pactar con ETA tuvo que matar ETA para que corriera el escalafón hasta llegar a estos miserables socialistas que hay hoy, que negocian con el partido de la ETA hasta los presupuestos de Navarra?
Osasuna no podía alargar estadísticas hasta el infinito. Algún día se romperían y sucedió ante el equipo de Bilbao, el Athletic Club. No hicieron nada los bilbaínos, pero los rojillos tampoco tuvieron su día y, además de las ausencias, jugaron como acomplejados.
Ya es oficial. El bilingüismo en el País Vasco ha muerto. El gobierno vasco, formado por el PNV y sostenido por el PSOE, ha decretado que los ayuntamientos podrán dirigirse al ciudadano solo en euskera.
Es la definición perfecta para este movimiento de neopropuestas de mejora que no son otra cosa que volver aquello que negamos para parecer modernos. O somos una sociedad sin memoria, o una sociedad imbécil o, ojo peligro, ambas son ciertas.
No quieren ciudadanos librepensadores, quieren rehenes a los que convertir, manoseándoles el cerebro, en sus futuros votantes. Así se entiende mejor la ofensiva de la ministra Celaá contra la educación concertada.
En 1978 nos unimos la inmensa mayoría para que España dejara de ser diferente y se convirtiera en una democracia avanzada. Cuarenta años después caminamos hacia el abismo.
Bueno, pues ya está aquí. El momio putrefacto que se ensayó en Navarra con Txibite pactando hasta con el partido de la eta ya ha llegado a la Moncloa.