Las nuevas modas y las grandes superficies están cambiando la forma de comprar en Pamplona. Por eso resulta casi llamativo y novedoso observar que algunas de las antiguas zapaterías de toda la vida siguen abiertas al público.
Es el caso de la tienda calzados Joseba, situada en la calle Pintor Basiano 12 en el barrio de Iturrama de la capital navarra. Está muy cerca de otros establecimientos que hemos conocido en este apartado de comercio local.
Como es el caso, por ejemplo, de la tienda Dúo de comida para llevar que dirigen Víctor Dúo y María Dolores Suescun en la misma calle Pintor Basiano 14, o la tienda de arreglos de ropa de Mina y Iulia en la calle Pintor Crispín 10.
Joseba Fernández Cabrera es un pamplonés de 61 años que dirige la zapatería que lleva su nombre en Iturrama. Curiosamente, Joseba fue un jugador navarro de baloncesto, alero pívot, en los años históricos del Calasancio Yoplait a finales de los años 70 y comienzos de los 80 del pasado siglo.
"Estuvimos dos años jugando en Primera B con Miguel Santos y luego en el Larios San Antonio de José Luis Abaurrea con los Javier Etayo, Lorenzo Motos, Gastaminza y Santi Elso, entre otros. Era un gran equipo", que Navarra no ha vuelto a tener.
El hecho de empezar con la tienda de calzado tiene un motivo: "Mis suegros se querían jubilar y en 1995 empecé a trabajar hasta asumir el negocio yo solo desde 1997. Vamos a cumplir los 50 años en el barrio y con clientela fija que es lo que nos mantiene activos, y seguramente me jubilaré al cumplir los 50 años de la tienda en 2027".
La tienda la abrieron sus suegros, Tomás Leranoz y Puri Goñi, en 1977 "cuando ya tenían unos años. En 1995 lo querían dejar y ningún hijo quería seguir. A mi me gustaba el trato personal y me cogí una excedencia, ya que trabajaba en una empresa con un contrato fijo", afirma Joseba.
"Estuve trabajando con Tomás y Puri un año viendo cómo era el negocio y para que la gente del barrio me conociese, que es importante en la tienda, y en 1997 ya me quedé solo en la tienda. Ahora hago los pedidos, las compras, las ventas..."
Joseba está contento con la tienda: "Nos da para vivir, No más. El local es mío y eso te salva mucho ya que hay un dinero que no se pierde en el pago del alquiler". El problema del futuro es el de casi siempre en este tipo de negocios: "No hay relevo porque mis hijos ya se dedican a otras cosas. Ni me lo han comentado", señala.
"Es una pena, pero los hijos ven que no tenemos fiesta cuando otros sí tienen. Navidad y Pre San Fermín es una campaña muy buena con muchas cosas de lona como las alpargatas. No puedes cerrar cuando quieres, pero en julio y agosto no abro por las tardes y me salvo un poco", explica Joseba Fernández.
Lo que más vende "es calzado de mujer. Mucha zapatilla de casa y las lonas de verano de mujeres. Un poco de caballero y menos de niño, porque hay pocos en el barrio, y algo de deportivas de caballero y de señora, pero el 70% es de mujer y más especializado en zapatillas".
Las compras en Internet "han hecho daño en los jóvenes y en los niños. La clientela es de 60 años para arriba. Las abuelas que compraban antes vienen ahora con sus nietos. Es un barrio de gente mayor y estamos más limitados que en otros barrios".
No obstante, "la gente siempre agradece el trato personal y prefieren que les aconseje. A muchas personas ya les conozco y se cual es el producto que les gusta", concluye Joseba.
