El barrio del Soto Lezkairu de Pamplona dio la bienvenida hace unos meses a un nuevo negocio, la librería Kokea. Se trata del proyecto más reciente de tres emprendedores navarros que llevan años enfocados en el ocio infantil de calidad. Por eso, Kokea no es sólo una librería, también es un espacio de talleres infantiles en el que los pequeños pueden dejar volar su imaginación y sacar toda su creatividad.
Los fundadores de Kokea son Mikel Gómez López, Miguel Sádaba y Nuria Ganuza. Los tres tienen un nexo de unión: el Valle de Egüés. Gómez es el fundador de Discover Bricks (Ripagaina y Sarriguren), Sádaba es cofundador de la librería La Valeta (Ripagaina) y Ganuza es fundadora de Jugando con Nuria (Sarriguren). Todos estos negocios están enfocados en el público infantil. En la actualidad, Sádaba ha salido de La Valeta para centrarse cien por cien en Kokea. "La Valeta sigue abierta en manos de mi anterior socio", indica. Por su parte, Ganuza ha traído sus talleres a Kokea y Gómez compagina su labor al frente de Discover Bricks con sacar adelante este nuevo emprendimiento.
Los tres socios son padres. Y, precisamente, de ahí nace esa vocación por ofrecer a los niños las mejores actividades para su tiempo libre. "Todos llevamos a nuestros hijos a actividades. Lo que te encuentras, normalmente, es que se busca más es el precio que la calidad", lamenta Gómez. Por eso, la idea de crear una empresa especializada en ocio de calidad para los más pequeños de la casa unió, desde un primer momento, a estos tres emprendedores. "Nos damos cuenta de que lo que ponemos ahí es la educación y el bienestar de nuestros hijos", señala Gómez.
De hecho, su socia explica que cuando están pensando en hacer algo, primero piensan en si llevarían a sus propios hijos. "Lo que ofrecemos a los clientes tiene que ser algo que a nosotros nos guste y que, como padres, llevaríamos a nuestros hijos".
Inauguraron el local de Kokea en septiembre. "Lo encontramos a finales de julio, pero tuvimos que hacer obra", explica Gómez. No obstante, en verano, todavía sin local, el negocio estaba en marcha: "Hicimos varios campamentos de verano".
Aunque la empresa Kokea nació con la vista puesta en las actividades infantiles creativas, cuenta con una amplia librería. Tiene títulos dirigidos al público infantil y juvenil. Y también se pueden pedir, por encargo, libros para adultos. "Para las actividades no hay mejor publicidad que tu tienda, a pie de calle, porque es un reflejo de lo que haces", indica Gómez.
La tienda tiene una parte muy importante dedicada a los libros. Pero en ella, los clientes también encuentran juguetes educativos, manualidades y actividades creativas. De hecho, uno de sus productos estrella son las máquinas de cricut, que permiten cortar diferentes materiales, además de dibujar, grabar o marcar.
Gómez tenía un deseo personal para la tienda. "En un viaje a Madrid vi una tienda que hacía lo mismo que yo en Discover Bricks, pero con juegos de mesa. Quería traer esa idea a Pamplona", explica. Por eso, en Kokea también se ha introducido un poco el juego de mesa. "No hablamos de un parchis o de un monopoli. Es muy diferente", advierte.
En cuanto a las actividades que organizan. Todos los socios coinciden en que son muy diferentes y espectaculares. Y ponen varios ejemplos. "El Ayuntamiento de Pamplona nos pidió algo especial para el 600 aniversario del Privilegio de la Unión", recuerda Gómez. Y desde Kokea prepararon un scape room urbano para 24 niños. "Lo dividimos en tres grupos, uno por burgo, y lo teatralizamos en la calle. Estuvo muy chulo".
En los últimos meses también han organizado un túnel del terror para Halloween en un colegio o la fiesta de Navidad de la CONCAPA, con circo y cuerda floja en el exterior. También se han hecho muchos talleres de juego de mesa. "El Valle de Egües, en la Semana de la Ciencia, nos dio la oportunidad de montar una actividad de juegos de mesa en familia. Fue muy bonito verles jugar juntos", rememora Ganuza.
Estos tres emprendedores no pueden parar quietos. De ahí que recientemente hayan cogido otro local en Sarriguren para ampliar y diversificar el negocio de Kokea. "En un primer momento iba a ser un almacén", comenta Ganuza. Pero esa idea evolucionó muy pronto. "Ha acabado siendo una sala para cumpleaños y eventos", comenta Gómez.
Pero no es una sala de cumpleaños como otras que hay por la zona: "No tenemos parque de bolas", dice Gómez muy orgulloso. Y explica que, en su lugar, hay juegos de mesa, escenario, karaoke, teatro, etc. Es un espacio preparado para desarrollar actividades creativas. "Es un reto porque los padres están acostumbrados a dejar a los niños en el parque de bolas y sentarse a tomar algo tranquilamente. En este espacio tienen que estar más involucrados", subraya su socia. "Queremos que los padres pasen tiempo con sus hijos", insiste.
Esta sala de cumpleaños se puede alquilar por horas. Pero Kokea ofrece también la posibilidad de contratar la organización completa del cumpleaños. "Nos dejas a los peques y les hacemos la merienda y una actividad creativa, dependiendo de los gustos del cumpleañero. Y también se puede tematizar la celebración", especifica Gómez.
En Kokea preparan actividades para niños desde 2 años y medio. "Adaptamos las actividades al rango de edad de los peques que vienen", insiste Gómez. Recientemente, han sacado unos bonos de actividades creativas. "Después de comprarlo, reservas la tarde que quieras. Con el bono sale a 6 euros la hora y, sin el bono, la actividad suelta cuesta 8 euros", explica.
