La última noche del año llegará acompañada de bajas temperaturas y posibles alertas por heladas en diversas zonas de Navarra, según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Este 31 de diciembre, el tiempo será estable con cielos mayormente despejados, pero el frío intenso marcará la jornada, especialmente durante la madrugada y las primeras horas del día.
Además, se ha activado una alerta amarilla por fenómenos meteorológicos adversos en toda la Ribera del Ebro, debido a la presencia de niebla que reducirá la visibilidad a menos de 100 metros. La alerta se activará este martes 31 a las 00:00 horas y se mantendrá vigente, al menos, hasta las 11:00 de la mañana.
Para el 31 de diciembre, la AEMET prevé cielos poco nubosos o despejados, aunque la Ribera amanecerá con nubes bajas, brumas y nieblas que podrían persistir en algunos puntos hasta el final del día. Las temperaturas mínimas se mantendrán cercanas o por debajo de los 0 grados, con heladas débiles generalizadas en todo el territorio. Las máximas oscilarán entre los 5 grados en Tudela y los 12 grados en Roncal. En Pamplona, las temperaturas oscilarán entre 1 y 9 grados, mientras que en Estella se espera una jornada con mínimas de 0 grados y máximas de 8 grados. El viento será flojo variable, predominando del sur en la vertiente cantábrica.
El 1 de enero, Navarra comenzará el año con un panorama meteorológico similar: cielos poco nubosos o despejados, salvo las habituales brumas y nieblas matinales en la Ribera, que podrían reaparecer al final del día. Las temperaturas mínimas apenas variarán, mientras que las máximas tendrán un ligero descenso en gran parte de la Comunidad Foral, salvo en la Ribera del Ebro, donde podrían experimentar un aumento algo más notable. En Pamplona, el termómetro oscilará entre los 2 y 10 grados; en Estella, entre 0 y 7 grados; en Roncal, entre 0 y 11 grados; y en Tudela, entre 0 y 8 grados. Las heladas débiles seguirán siendo generalizadas, aunque en la Navarra cantábrica serán menos probables.
