Estábamos avisados desde hace días, cuando la AEMET alertó de la posibilidad de tromentas. Pues la lluvia ha llegado esta tarde a la zona centro de Navarra, desplazándose de oeste a este y dejando un respiro tras más de una semana de temperaturas extremas. En Pamplona, las primeras gotas han caído poco después de las cuatro, acompañadas de fuerte viento y algunos truenos.
Las precipitaciones han sido de escasa importancia. Apenas han caido 0,7 litros por metro cuadrado entre las 14:30 y las 15:30, pero eso, junto con el aire del norte, ha sido suficiente para refrescar el ambiente.
Así, de los 34,3 grados registrados a mediodía, se ha pasado a 23,7 grados pasadas las cinco de la tarde. Un alivio que contrasta con la madrugada anterior, en la que los termómetros apenas bajaron de los 25 propinando a Pamplona una de sas noches llamadas "tropicales".
Según el radar de Aemet, las tormentas se desplazan hacia el valle de Ultzama y la zona norte, aunque con poca intensidad. Ayer, sin embargo, sí dejaron registros destacados en los valles pirenaicos.
La previsión de la Aemet para hoy apunta a cielos nubosos que tenderán a poco nubosos al final del día, salvo en el noroeste, donde se formará nubosidad baja. También existe probabilidad de chubascos dispersos o tormentas ocasionales.
De todas formas es sólo un espejismo, porquer las temperaturas van a volver a subir. Según la AEMET, para mañana jueves, día del chupinazo de Tafalla y Burlada, se espera en Navarra cielo poco nuboso o despejado con alguna nubosidad de evolución durante las horas centrales que podría ir acompañada de algún chubasco o tormenta dispersa y ocasional por la tarde en el Pirineo. Temperaturas mínimas en descenso en la mitad sur y con pocos cambios en el resto. Temperaturas máximas con cambios ligeros predominando los aumentos Las temperaturas máximas superarán los 36 grados en el centro y sur de la Comunidad y los 38 en Pamplona y en el área de Tudela.
