Los Juegos Olímpicos de Río 2016, o lo que es lo mismo, la competición deportiva más importante del mundo, ya ha echado a andar en alguna de las diferentes modalidades y está a punto de hacerlo en el resto de deportes. Es el momento de exprimirse al máximo después de cuatro años esperando este día.
De esto sabe mucho el navarro de Murieta Manu Etayo, entrenador ayudante de la selección española de balonmano femenino. “No tenemos nervios, pero sí ganas de empezar a competir”, cuenta el entrenador, “después de tanta preparación, todo el verano entrenando, queremos que llegue lo bueno la competición”.
Las “guerreras” del balonmano español debutan este sábado ante Montenegro, a partir de las 21.40 horas en España. En estos Juegos Olímpicos, la escuadra derrocha acento navarro y es que Manu Etayo trabaja codo con codo con otras dos deportistas de nuestra Comunidad: Nerea Pena y Naiara Egozkue.
EL BUEN ESTADO DE FORMA DE LAS GUERRERAS
“La preparación ha ido muy bien desde que comenzamos allá por finales de junio”, explica Etayo, “y hacemos una valoración muy buena de los amistosos”. De hecho las guerreras, que este año son la única esperanza del balonmano español después de que la selección masculina no lograra la clasificación, han ganado todos sus encuentros salvo el último, que perdieron contra Suecia. “Este primer fallo nos sirve para sacar conclusiones y saber que los partidos aquí en Río van a depender de pequeños detalles”, cuenta Etayo.
Tras el duelo con Montenegro, las chicas tendrán que verse con Noruega, Brasil, Rumanía y Angola. Manu Etayo considera que todas las selecciones llegan bastante parejas: “Angola tiene un poco menos de nivel, pero Noruega (actual campeona del mundo) lo ha ganado todo, Rumania estuvo en podio en el último mundial, Brasil ya ha sido campeona del mundo y Montenegro jugó la última final olímpica”.
Aún así Etayo, mano derecha del seleccionador nacional Jorge Dueñas, considera que deben ser ambiciosos en los objetivos: “Llegar a cuartos, pero con los pies en el suelo, sabiendo que va a ser complicado”.
LA VILLA OLÍMPICA, VISTA DESDE DENTRO
El navarro cuenta que llevan varios días de adaptación en Río, primero al cambio horario y luego ultimando los entrenamientos. Entre sesión y sesión también disponen de tiempo para el descanso. “Sobre todo se puede pasear”, relata Manu Etayo, “te encuentras con deportistas que admiras y es muy bonito”.
El entrenador destaca el encuentro con Rafa Nadal, el abanderado de España y el deportista más solicitado en la concentración. No puede dar diez pasos sin que el flash de una cámara se active o le soliciten una foto, pero el balear responde siempre amablemente. Así lo ratifica Etayo: “Ver por ejemplo a Rafa Nadal, con su sencillez y paciencia para a atender a todo el mundo; esto es una suerte, estar aquí con todos estos grandes deportistas”.
“Estar en Río con las guerreras viviendo este ambiente es un sueño cumplido como entrenador”, cuenta con la emoción a flor de piel este navarro inmerso en la competición deportiva más grande de la historia. “Quiero disfrutarlo a tope desde la ceremonia de inauguración, pero trabajando también con toda nuestra fuerza”.