El Ayuntamiento de Pamplona ha modificado los criterios para la autorización de actividades en la vía o espacios públicos en relación a las peticiones de los centros educativos, una medida tomada de forma provisional mientras se acomete la redacción de una nueva ordenanza sobre la utilización del espacio público que fije los criterios de las autorizaciones de uso, ahora reguladas mediante resolución de concejalía.
Por el momento, la nueva resolución del concejal delegado del Área de Seguridad y Convivencia Ciudadana, Endika Alonso Irisarri, ha eliminado la frase “Las peticiones de los centros educativos no contarán con apoyo policial y deberán cumplir las normas de circulación, ya que no se cortará el tráfico“, la última previsión que integra el aparado “I”, relativo a procesiones, cabalgatas, olentzeros, carnavales y otros desfiles”. El resto del texto original sigue siendo el mismo, aunque en la medida en la que la normativa lo permita, se reinterpretarán sus previsiones con criterios más flexibles.
La frase eliminada, establecida en la normativa municipal desde el año 2005, es la que ha hecho que en los tres últimos años desde el Consistorio se haya dado un tratamiento restrictivo a los actos de los centros escolares. De esta forma, por ejemplo, los 8 desfiles de carnaval de 2022 y los 9 de 2023 tuvieron que realizarse por las aceras; eso mismo sucedió con los desfiles de gigantes. De los que fueron autorizados, 11 y 13, respectivamente, no pudieron bajar a calzada 9 en 2022 y 11 en 2023, algo que se repitió en el caso de 7 y 6 olentzeros en las navidades de ambos años.
Según han informado desde el equipo de gobierno de Asirón el objetivo de la supresión es intentar que el Ayuntamiento de Pamplona preste el apoyo policial a todos esos desfiles, siempre de forma consensuada con la entidad organizadora e intentando priorizar en los trayectos el tránsito por zonas peatonales. Desde el Consistorio se está explorando, además, que personal civil pueda colaborar en distintas cuestiones de seguridad ciudadana y el ámbito concreto de los eventos organizados por los centros escolares podría ser uno de los campos de aplicación de este apoyo.
El establecimiento de los criterios del uso del espacio púbico en la normativa municipal con rango de Ordenanza será una forma de actualización, a la vez que buscará establecer un espacio de decisión reglado que dificulte la aleatoriedad en la aplicación de sus previsiones y que, además, establezca supuestos con criterios uniformes.
