El juez que instruye el caso sobre el traslado de las estatuas de los reyes de Navarra desde el Paseo de Sarasate hasta el parque de la Taconera ha advertido que la decisión del alcalde Joseba Asirón podría ser ilegal. Así lo señala en un auto al que ha tenido acceso Navarra.com en el que, pese a no suspender cautelarmente el traslado, deja claro que en caso de que el recurso judicial prospere, el Ayuntamiento deberá devolver las esculturas a su lugar original.
La resolución judicial responde a una petición presentada por Cristina Ibarrola, concejal y portavoz de Unión del Pueblo Navarro (UPN), que solicitó frenar las obras autorizadas por el Gobierno municipal el pasado 4 de julio. Estas contemplan el traslado y restauración de las esculturas como parte del proyecto de reurbanización del Paseo de Sarasate, en pleno centro de Pamplona.
El magistrado considera que no se ha demostrado que ejecutar ahora el traslado suponga un daño irreversible para el recurso. Sin embargo, admite que el acuerdo municipal “puede ser ilegal” y que, si así se concluye en la sentencia, habrá que reponer las estatuas en su ubicación actual. Es decir, el juez abre la puerta a que se declare ilegal el traslado y se obligue al Ayuntamiento a revertir todo el proceso, lo que implicaría un gasto económico adicional.
Pese a ello, el auto no concede la suspensión cautelar porque entiende que ese perjuicio económico no es motivo suficiente para frenar el proyecto. Según el juez, el consistorio podría asumir el coste de deshacer lo hecho sin que ello suponga una “perturbación grave” de los intereses generales ni dañe las arcas municipales de forma irreversible.
En el auto, el magistrado señala que no se ha acreditado que el traslado implique un riesgo real para las estatuas, que están incluidas en el catálogo de elementos protegibles de la ciudad. También descarta que vaya a haber daños al parque de la Taconera, nuevo emplazamiento previsto, ya que el proyecto incluye medidas específicas de protección y restauración.
El juez insiste en que la medida propuesta por el Ayuntamiento es reversible, y que en caso de que el tribunal estime el recurso, será posible deshacer el traslado y restituir las estatuas al Paseo de Sarasate.
En conclusión, aunque el juez mantiene la negativa a paralizar las obras, deja negro sobre blanco que el fondo del asunto —la legalidad del traslado— sigue pendiente de resolverse y que una futura sentencia podría tumbar toda la operación ordenada por Asirón.