Enfado y rabia del Partido Socialista de Pamplona y de su socio de oposición EH Bildu por la reapertura de una infraestructura para el disfrute y uso de todos los ciudadanos de Pamplona, la pasarela de Labrit.
Tras toda una legislatura trabajando para que la pasarela de Labrit no se abriera de nuevo en Pamplona, socialistas y radicales abertzales han coincidido en tener un comportamiento alejado del que se presume para unos concejales de la ciudad y no han acudido a la visita programada esta mañana.
La pasarela del Labrit de Pamplona se ha reabierto este miércoles al paso peatonal y ciclista tras concluir las obras de refuerzo y reparación de esta infraestructura, que conecta el baluarte de Labrit con el parque de la Media Luna. La pasarela superó el pasado mes de diciembre las pruebas de carga dinámica y estática realizadas, con hasta 300 kilos por metro cuadrado.
Bildu apostaba por derribar la infraestructura para que Pamplona perdiera el dinero y la obra mientras que los socialistas han trabajado a destajo para impedir que la pasarela de Labrit se pudiera abrir esta misma legislatura, absolutamente rendidos a los postulados de los radicales.
Sin embargo, el consistorio de Pamplona, de la mano del concejal Fermín Alonso, han conseguido recuperar la obra para la ciudad y ahora van a reclamar el coste de la reparación a los constructores.
La pasarela llevaba cerrada desde septiembre del año 2016 tras detectarse problemas de oxidación y deterioro de algunas placas de acero. Las obras de refuerzo y reparación han tenido un coste de 807.214 euros, a los que hay que sumar los estudios y trabajos técnicos encargados desde 2016, además del proyecto de reparación, inspecciones y andamiaje, y de otras actuaciones alrededor de la propia infraestructura, alcanzando un gasto total de 1,4 millones de euros. El Ayuntamiento reclamará ahora esa cifra a las partes intervinientes en el proceso, desde la redacción del proyecto, a su ejecución y la dirección facultativa, a través de un procedimiento de responsabilidad. Para ello, ya en el mes de junio se encargó un acta notarial que "reflejara todos los daños que las obras de reparación han permitido descubrir y documentar".
Esta mañana los concejales de todos los grupos de Pamplona estaban citados para conocer el fin de las obras y la reapertura de la pasarela, algo que no han digerido ni socialistas, ni abertzales ni los dos concejales del PNV (Geroa Bai).
Ninguno de ellos han acudido y han criticado que Pamplona disponga de nuevo de esta pasarela para comunicar el Casco Antiguo con el II Ensanche. Han calificado la nueva infraestructura para Pamplona de "electoralista" y han criticado "el derroche", a pesar de que se va a reclamar la totalidad del gasto de las obras de reparación.
"Toda la gestión de esta obra ha sido un ejemplo de oscurantismo y una tomadura de pelo y no podemos respaldar con nuestra presencia el epílogo de este sinsentido", han asegurado desde EH Bildu, el grupo de Joseba Asirón.
Los socialistas, que respaldan sin reparos todas las acciones de EH Bildu en Pamplona, han mantenido que no han acudido a la visita como protesta "al derroche y a la gestión oscurantista y unilateral de Navarra Suma". Si bien ha considerado la infraestructura "necesaria"
En declaraciones a los medios de comunicación, el alcalde de Pamplona, Enrique Maya, ha destacado que la apertura de esta pasarela "es una liberación, ya hemos pasado capítulo y ahora a disfrutar de esta conexión". "Ahora a otra cosa, a que trabajen los servicios técnicos y jurídico para que nos paguen", ha remarcado. Y ha resaltado que "se han hecho todo tipo de pruebas de carga, estáticas y dinámicas, y ha cumplido con todos sin ningún problema; y ahí están los técnicos que avalan todo lo que se ha hecho".
El alcalde ha afirmado que volver a construir una nueva pasarela "habría sido más caro y jurídicamente muy difícil de defender". "Es mucho más fácil reclamar algo cuando lo has reparado, sabes lo que ha costado, lo tienes todo perfectamente detallado, incluso con actas notariales, para saber cuáles eran los problemas, cuáles han sido las soluciones y que se nos pague", ha subrayado. En este sentido, ha criticado que "se les reclamó a los arquitectos casi como si fuera una multa de tráfico" que "desde el punto de vista jurídico era ridículo". "Hoy estaríamos sin pasarela y con una postura muy difícil de cara a los juicios que sin ninguna duda habrá para resolver esto", ha aseverado. Así, ha esperado que "con toda esa información y con los servicios jurídicos consigamos que prospere" la reclamación por el "coste total" de esa "mala ejecución inicial de la pasarela".
Preguntado por la ausencia de los grupos de la oposición, Maya ha afirmado que "hoy no están aquí porque están enrrabietados". "Han tomado una actitud con esta obra de dejar absolutamente solo al equipo de gobierno" con un expediente "muy complejo". Ha opinado que "para ellos es un fracaso" que la pasarela se haya reabierto. "Les hemos invitado a que vinieran y no han querido venir. Como se hace con todas las obras, cuando se acaban se vienen a ver y ya está", ha zanjado. Ha destacado, además, que "reparar la pasarela es una competencia de la Junta de Gobierno no del Pleno".
Según ha explicado el Ayuntamiento de Pamplona en una nota, los trabajos se han alargado ante las "nuevas deficiencias detectadas conforme se avanzaba en la reparación". En este sentido, en un informe del pasado mes de junio, al margen de los defectos detectados por el Colegio de Ingenieros de Navarra que dio lugar al proyecto de reparación, se señalaban "deficiencias constructivas en el entramado de acero de la pasarela y en la soldadura de las distintas partes que lo componen" que "suponían un fuerte incremento del trabajo y del tiempo necesario para realizarlo y que se añadía a las operaciones de refuerzo ya previstas en el proyecto inicial".
