La consejera portavoz del Gobierno de Navarra, Amparo López, ha asegurado que el traslado de un letrado que denunció irregularidades en la adjudicación de las obras de Belate se debió a una "reorganización administrativa interna" dentro del Departamento.
La Oficina de Buenas Prácticas y Anticorrupción de Navarra (OANA) dictaminó que ese traslado era una "represalia".
En conferencia de prensa tras la sesión de gobierno, López ha afirmado que este funcionario pasó a ocupar una plaza en el servicio de Conservación y Vialidad del Gobierno de Navarra, que tiene un "volumen de trabajo importante".
Se entendió que ese traslado "iba a permitir una gestión más eficiente y efectiva" del servicio, ha declarado López, quien ha precisado que fue "una reorganización administrativa interna" por resolución del propio director de Obras Públicas.
López ha comentado que se han realizado siete cambios de adscripción en el Departamento, dentro de la potestad que tiene el mismo para hacerlo, ha dicho.
La consejera, quien no ha querido "entrar en juicios de valor" sobre este tema, ha destacado que en el Gobierno de Navarra se respeta la actuación hecha en el Departamento dentro de su capacidad de autoorganización y reparto de cargas de trabajo.