POLÍTICA
Símbolos franquistas en el Gobierno foral: retiran cinco Cruces Laureadas en dos edificios públicos
Cuatro han sido retiradas del Salón de Sesiones en el Palacio de Navarra y la quinta de una vidriera del edificio de Hacienda.
Cuatro han sido retiradas del Salón de Sesiones en el Palacio de Navarra y la quinta de una vidriera del edificio de Hacienda.
El Gobierno de Navarra, a través del Instituto Navarro de la Memoria y el departamento de Hacienda y Política Financiera, ha retirado la Cruz Laureada de San Fernando de cinco escudos de Navarra situados en las dependencias de Hacienda y en el Salón de Sesiones del Palacio de Navarra.
Con la retirada de estos elementos, el Gobierno de Navarra sigue desarrollando sus políticas públicas de memoria y avanza en el cumplimiento de la Ley Foral de Símbolos y de la Ley Foral de Memoria Histórica, que establecen la retirada y sustitución de la simbología del régimen franquista.
Con este fin, Gobierno de Navarra está aplicando desde 2016, en colaboración con la Federación Navarra de Municipios y Concejos y un importante número de entidades locales, un Programa que pretende la democratización del espacio público y la eliminación de simbología que recuerde y ensalce la violencia.
Las Cruces Laureadas, insignia concedida por Francisco Franco a Navarra en 1937 para homenajear y reconocer a los voluntarios navarros que apoyaron el golpe militar de 1936, estaban situadas en el artesonado de madera del Salón de Sesiones y en una vidriera del edificio de Hacienda y Política Financiera.
VIDRIERA Y ARTESONADO
La vidriera, situada en una ventana del Edificio de Hacienda, ha sido modificada por un artesano vidriero para retirar las piezas correspondientes a la cruz.
Por otro lado, las obras del Salón de Sesiones, donde cada miércoles el ejecutivo foral lleva a cabo su reunión semanal, han sido acometidas por una empresa especializada en restauración, que ha retirado las piezas de madera que conformaban la cruz, colocada de manera independiente a los escudos que decoraban cada una de las esquinas del salón, y ha restaurado estos fragmentos del artesonado.
EN CONTRA DE LA NEUTRALIDAD
Al hilo de esta misma cuestión sobre los símbolos ideológicos en espacios públicos, el Defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, ha respondido al informe enviado por la eurodiputada de UPYD-ALDE, Maite Pagazaurtundúa, sobre el adoctrinamiento a niños y discriminación en las aulas en Cataluña.
En su carta, remitida hoy, recuerda que la presencia de símbolos ideológicos en edificios públicos va en contra el principio de neutralidad de las instituciones pero también admite que hay casos de acoso en las aulas.
Ante ello, la diputada magenta lo tiene claro: el gobierno debe crear cauces y mecanismos seguros de denuncia y tramitación para que afloren todos los casos de discriminación y violación a la libertad de conciencia que existen en realidad.