Los toros de José Escolar han ofrecido este sábado en Pamplona un auténtico espectáculo de encierro con una velocidad endiablada. La segunda carrera de los Sanfermines de 2023 ha tenido una duración de 2 minutos y 15 segundos.
No ha ocurrido nada grave porque los toros de Escolar se han apartado a los mozos con sus pitones, sin hacer por ellos, en un comportamiento de mucha nobleza. En muchas ocasiones una embestida hubiera sido fatal, pero afortunadamente para los corredores los toros han preferido avanzar en su veloz recorrido y llegar a la plaza en un tiempo casi récord.
El primer balance de heridos deja cuatro traslados al Hospital Universitario de Navarra, uno de ellos por el golpe del pitón de un toro, pero sin cornada. Este corredor, que presenta una herida en un brazo, ha sido trasladado desde el tramo de Mercaderes, donde otra persona ha sufrido una contusión con deformidad en el brazo. Entre los heridos figura además una persona procedente de la calle Estafeta con un pisotón en el tórax y otra de Espoz y Mina con un pisotón en el cráneo, con un traumatismo craneoencefálico.
En cuanto a la carrera, los cabestros han vuelto a poner el ritmo y han cogido la cabeza de la manada en la cuesta de Santo Domingo. El toro cárdeno más rezagado ha dejado varios derrotes durante toda la subida de la cuesta hasta el Ayuntamiento y un mozo se ha visto sobrepasado y engullido por los toros. Ya en la plaza, en la zona derecha del vallado, se ha vivido el primer momento de peligro, con uno de los toros a punto de cornear a un par de corredores.
Desde la mitad del encierro y la curva de Estafeta, uno de los toros ha tomado la delantera y ha llevado el liderazgo de la manada de una manera impresionante, con un ritmo constante y sin bajar en ningún momento la velocidad. La calle Estafeta ha estado jalonada de momentos de peligro, casi todos solventados con limpieza por la nobleza de los animales.
A pesar de estirarse el grupo, los seis toros de Escolar han entrado casi al unísono a la plaza de toros, en dos grupos de 3. Sin duda alguna, han enfilado los corrales de la plaza de toros.
Los toros de José Escolar corrían este sábado en Pamplona su séptimo encierro de San Fermín, el día de la semana, sábado, que había acumulado hasta la fecha más cornadas en las carreras.
Desde que debutó en Pamplona, los toros de José Escolar habían dejado 8 heridos por asta de toro: 4 en 2015, 2 en 2016 y 2017 y 1 en 2022. Desde 2015 era la segunda ganadería más peligrosa, solo superada por Cebada Gago.
En 2019 los toros de Escolar habían hecho su mejor marca con 2 minutos y 13 segundos. Sus otros registros son: 2’44 en 2015, 4’01 en 2016, 4’03 en 2017, 2’42 en 2018 y 2´25 en 2022.
En 2015, un toro de José Escolar se dio la vuelta nada más salir, regresó a los corrales y ni los pastores ni los cabestros lograron que volviese a la calle, teniendo que ser trasladado a la plaza en camión. En 2016, otro Escolar se volvió nada más comenzar el encierro y llegó en solitario a la plaza junto a los cabestros. Lo mismo pasó en 2017.
Por la tarde, serán lidiados por los diestros Fernando Robleño, Juan del Álamo y Borja Jiménez.
Blanca y roja
