SOCIEDAD
Aritz, el joven que ha creado el primer gimnasio móvil para llevar deporte a los pueblos pequeños de Navarra
Las clases se desarrollan en parajes como Sorabil, la orilla del río Irati en Aribe o los alrededores del Palacio de Arce.

Mantener una vida activa es esencial para prevenir problemas de salud como la obesidad, la diabetes o las enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, en pueblos pequeños y zonas rurales, la dispersión geográfica dificulta el acceso al ejercicio regular, favoreciendo hábitos sedentarios que afectan al bienestar físico y mental. Llevar la actividad física a estas áreas se ha convertido en un reto clave para mejorar la calidad de vida de sus habitantes.
El joven emprendedor Aritz Carballo, natural de Espinal, ha puesto en marcha este verano Mogiegim, el primer gimnasio móvil de Navarra. Su objetivo es acercar el ejercicio físico a los valles de Erro, Arce y Aézcoa, así como a localidades cercanas, sin importar la edad o condición física de los participantes.
El nombre del proyecto proviene de la expresión en euskera “Alo, mogie!” (“¡Venga, muévete!”), muy usada en el valle de Erro para animar a alguien que está parado. Carballo, técnico deportivo de la Oficina de Gestión Cultural y Deportiva Auñamendi, confiesa que la idea nació pensando en personas como su padre, poco aficionadas al deporte. “Al final, es llevar un servicio innovador y de calidad cerca de casa para que la gente más sedentaria ya no tenga ninguna excusa”, señala.
Desde el 14 de julio hasta el 12 de septiembre, Mogiegim ofrece sesiones semanales de lunes a viernes, con precios entre 63 y 125 euros. El gimnasio móvil es una especie de carro que transporta todo el material necesario para entrenar: barras olímpicas, discos, mancuernas, pesas y soportes. Las inscripciones se realizan en el teléfono 623 289 063.
Los participantes pueden elegir entre gimnasia de fuerza, orientada a mejorar la musculatura y pensada especialmente para personas mayores, o cross training, que combina fuerza, resistencia, cardio y movilidad, con mayor intensidad para jóvenes. “El trabajo de fuerza funcional es el que mayor evidencia científica tiene en cuanto a beneficios para la salud. Se trata de que el tiempo que entrenemos sea lo más eficiente posible”, afirma Carballo.
El valor añadido de Mogiegim está en sus escenarios. Las clases se desarrollan en parajes como Sorabil, la orilla del río Irati en Aribe o los alrededores del Palacio de Arce, además de en pueblos como Espinal, Villanueva de Arce o Abaurrea Alta. Si el tiempo no acompaña, se trasladan a los frontones. “Es una gozada hacer ejercicio al aire libre, rodeado de naturaleza, socializando y escuchando los pájaros”, comenta el impulsor del proyecto.
Este es el segundo gimnasio móvil en toda España, tras uno ubicado en Jaén. Su puesta en marcha ha contado con el asesoramiento del Servicio de Apoyo al Emprendimiento de CEDERNA GARALUR, cofinanciado por el Servicio Navarro de Empleo.
No ha sido un camino sencillo. Carballo ha tenido que hacer una inversión importante y, tras serle denegadas varias subvenciones, ha recurrido a acuerdos publicitarios con empresas locales y al respaldo de asociaciones y entidades de la zona, que ceden espacios y ayudan en la difusión. “Sin su financiación, hubiese sido imposible este proyecto”, reconoce.
El apoyo de colectivos como Garaitzeko Asi, Gure Aizpea y Lakorri ha sido clave para que Mogiegim se convierta en una realidad. Estas asociaciones colaboran en la gestión, la organización y la difusión de las actividades, permitiendo que el gimnasio móvil pueda llevar salud y bienestar a cualquier rincón del Pirineo navarro.