• lunes, 28 de julio de 2025
  • Actualizado 17:55
 
 

Una avería retrasa la reapertura de los ascensores más usados de Pamplona: seguirán cerrados hasta otra fecha

Una avería imprevista ha obligado al Ayuntamiento a retrasar una semana la puesta en marcha de uno de los ascensores que conecta Rochapea con el Casco Antiguo de Pamplona.

Las reparaciones en los ascensores de Descalzos se prolongan una semana más por la aparición de una avería inesperada y volverán a estar operativos el 4 de agosto.
Las reparaciones en los ascensores de Descalzos se prolongan una semana más por la aparición de una avería inesperada y volverán a estar operativos el 4 de agosto.

Los ascensores urbanos de la calle Descalzos, que conectan el barrio de Rochapea con el Casco Antiguo de Pamplona, permanecerán cerrados una semana más de lo previsto debido a una avería inesperada. Aunque el Ayuntamiento había anunciado que una de las cabinas volvería a funcionar el lunes 28 de julio, finalmente será el 4 de agosto cuando se reabra al público.

La avería se ha detectado durante la parada técnica de dos semanas que debía permitir la reapertura parcial del servicio. Según ha informado el Ayuntamiento, la reparación requiere sustituir varias piezas, cuya llegada e instalación obligan a retrasar el calendario previsto. Hasta entonces, ambas cabinas seguirán fuera de servicio.

Los ascensores, inaugurados en 2008, están siendo sometidos a una sustitución completa de su sistema mecánico y estructura, ya que se encuentran próximos a cumplir 20 años. Las obras continuarán hasta finales de noviembre, con el objetivo de garantizar el servicio parcial durante la mayor parte del tiempo. Tras la reparación actual, se instalará una valla de separación entre las dos cabinas por motivos de seguridad y se proseguirá con la reforma planificada.

Cada año, estos ascensores salvan un desnivel de 29,6 metros entre Corrales del Gas y la calle Descalzos, realizando cerca de 570.000 viajes, lo que supone un uso anual por parte de más de 5,9 millones de personas. La antigüedad, el uso intensivo y la ausencia de mantenimiento preventivo han provocado que estén mecánicamente obsoletos, generando averías continuas, según ha señalado el Consistorio.

El plan de actuación contempla en esta primera fase garantizar el correcto funcionamiento de una de las cabinas, mientras la otra es completamente renovada. El presupuesto total de esta intervención asciende a 259.000 euros e incluye tanto la reforma mecánica como estructural de uno de los ascensores. Durante esta etapa, también se realizarán trabajos previos en el edificio para garantizar la seguridad de las obras y de los usuarios.

Ante la prolongación del cierre, se mantendrá el refuerzo en la línea 14 del transporte urbano comarcal, que seguirá con una frecuencia de paso de 15 minutos, en lugar de los 30 habituales. Esta línea conecta Rochapea con el Casco Antiguo. Además, se ha habilitado una parada provisional de subida antes del cruce del río, próxima a los Corralillos, que será señalizada con un poste.

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