SOCIEDAD
Carmen, la pamplonesa que confió en la ley y ahora ha recibido una inesperada recompensa
Carmen del Milagro ha demostrado que la memoria y la honradez pueden caminar juntas, incluso dos años después.
La historia de Carmen del Milagro parece sacada de una película sobre la honradez y la memoria. En noviembre de 2023, esta vecina encontró una cartera con 817,96 euros en efectivo, además de documentación y tarjetas bancarias, en el interior de un tren. En lugar de quedársela, decidió llevarla a las dependencias de la Policía Nacional en Pamplona, en la calle General Chinchilla 3-5, para que el dinero llegara a su dueño.
En aquel momento, los agentes de la Oficina de Denuncias y Atención al Ciudadano redactaron un acta de entrega de efectos y asumieron la custodia del dinero. Durante meses, la Brigada Provincial de Policía Judicial trató de localizar al propietario, un ciudadano turco que nunca llegó a reclamar la cartera.
Pasado un tiempo, Carmen recordó que la ley ampara a quien actúa de buena fe. El procedimiento de objetos perdidos establece que, transcurridos dos años sin que nadie reclame, el hallador puede quedarse con el dinero o los efectos encontrados. Y Carmen, previsora, se puso una alarma en el móvil con la fecha exacta para que no se le olvidara.
El recordatorio sonó ayer. Así que esta mañana, dos años después de su gesto, la mujer ha vuelto a las dependencias policiales de Pamplona para formalizar un nuevo acta, esta vez de recepción. En ella quedó reflejado que ha recuperado los más de 800 euros que intentó proteger en su momento.
Su caso es un ejemplo de cómo la honestidad también tiene recompensa. La Policía Nacional, que mantiene cada año cientos de objetos y cantidades bajo custodia, ha recordado que el protocolo garantiza tanto la transparencia del proceso como la protección de los derechos del ciudadano que actúa correctamente.
Entre los objetos que más se entregan en dependencias policiales están carteras, móviles, mochilas y, en ocasiones, sobres con dinero en efectivo. Pocos, sin embargo, se preocupan por hacer el seguimiento como lo hizo Carmen, que incluso dejó constancia de su gesto con un documento oficial.
Su historia se ha hecho viral entre los agentes, que destacan el valor simbólico de su acción. En un momento en el que los objetos perdidos suelen acabar olvidados, Carmen del Milagro ha demostrado que la memoria y la honradez pueden caminar juntas, incluso dos años después.