La presidenta del Gobierno foral,
María Chivite, ha hecho un
llamamiento al "esfuerzo colectivo" de las diferentes administraciones con la iniciativa privada y los
sindicatos y trabajadores para
construir "un nuevo modelo de economía" en el en que Navarra "nos jugamos mucho".
"El momento es ahora", ha subrayado tras incidir en la
necesaria transformación de la empresa navarra, su digitalización y modernización, especialmente la de la automoción por su peso en el PIB y las exportaciones, un proceso en el que se deben implicar todos los actores, aprovechar las ayudas que en este momento se esperan de Europa, sumar inversiones privadas y apoyar el despegue en el sistema educativo y de relaciones laborales con el que ya cuenta la Comunidad foral.
Lo ha señalado en la clausura de la jornada "
Navarra es industria", organizada por la UGT con representantes sindicales y de empresas del sector del automóvil, del Gobierno foral y del Ministerio de Industria para debatir sobre las perspectivas industriales de la Comunidad foral vinculadas con el desarrollo del coche eléctrico.
A este respecto, Chivite ha considerado "oportuno" el acto organizado para la reflexión y análisis compartidos, y ha analizado que el momento actual reitera que
la estructura del PIB navarro hace "resistir mejor los momentos difíciles", pero "es importante que apoyemos a la industria y a su transformación para ganar en competitividad y que eso redunde en un empleo estable y de calidad".
"La industria navarra es un ejemplo de compromiso y audacia", tanto la del automóvil como la agroalimentaria y el resto de Pymes industriales, ha valorado, al tiempo que ha analizado los indicadores económicos, de afiliación a la Seguridad Social y Empleo, que apuntan a la recuperación de Navarra e "invitan al optimismo".
"Pero no está todo hecho", ha advertido la presidenta, que ha asegurado que ya antes de la pandemia la administración foral tenía su foco en el proceso transformación que ahora se pretende acelerar, para lo que su Gobierno cuenta con
33 millones para la transformación de la industria o los 500 millones del Plan Reactivar Navarra, a lo que se sumarán los fondos del plan Next Generation.
"
Tenemos recursos para invertir y una estrategia clara que compartimos", ha dicho sin querer dejar de lado a ninguno de los sectores implicados, ha dicho con una referencia expresa a los trabajadores, a quienes
ha agradecido su "resiliencia, capacidad de adaptación y paciencia" y cuyos derechos laborales "no pueden ni deben" perderse en este proceso.
Además ha apuntado al Consejo de Diálogo Social como foro que reúne a los principales actores de este cometido de transformación, porque
"o colaboramos y trabajamos en común o no lograremos pasar esta prueba con éxito".
La jornada la ha abierto el presidente de la Confederación Empresarial de Navarra (CEN), Juan Miguel Sucunza, quien ha recordado que
el 30 % del PIB de Navarra lo genera la industria, "un tesoro que no podemos perder" y para cuyo mantenimiento "ahora se nos presenta una oportunidad" con los fondos europeos Next Generation, ha dicho para valorar además la existencia del Consejo de Diálogo Social donde "trabajar conjuntamente" todos los implicados.
En la misma línea, el presidente de Volkswagen Navarra, Emilio Sáenz, quien
ha agradecido la "buena gestión" realizada por la dirección, la plantilla y los proveedores por la "gran disciplina" observada para trabajar durante la pandemia, aunque el trabajo se ensombrece en el punto actual por problemas ajenos como la falta de semiconductores.
"En este ambiente confuso,
tenemos dos desafíos", como son el inmediato
lanzamiento del nuevo Polo y a finales de septiembre
el del tercer modelo de la planta navarra, el Taigo, ha señalado Sáenz, quien ha subrayado el "rol cada vez más importante" de los proveedores navarros en la producción de la planta.
"Otro desafío es la
electrificación del parque de vehículos nacional", ha reconocido un responsable de VW Navarra que ha abogado por trabajar "con humildad, con respeto y ahora más que nunca trabajando unidos" con los gobiernos navarro, central, la CEN y la parte social de la fábrica, algo "fundamental".
La apertura de la jornada la ha zanjado el consejero de Desarrollo Económico y Empresarial, Mikel Irujo, quien
ha asegurado que en Navarra "estamos plenamente preparados para afrontar este reto", por diferentes motivos, entre ellos el papel preponderante de su industria automovilística (suma el 1 % de toda la producción de Europa), que emplea de forma directa a 13.000 personas (el triple si se suma el empleo indirecto) y exporta el 45 % de los 3,7 billones que engloba la exportación de la Comunidad foral.
Además, "
Navarra dispone mano de obra altamente cualificada y su sistema educativo ofrece una alta capacidad formativa", datos que junto a otros le han hecho concluir que la Comunidad foral está "totalmente preparada para asumir el reto de la transición", si bien ha dejado claro que esta no llegará "sin digitalización", un proceso en el que en el Gobierno "recogemos el guante" ya que "
la cooperación público-privada va a ser determinante", ha invitado.
