El navarro, Alfredo Alfaro, propietario de la administración número 1 de Olot, en el centro de la ciudad, ha repartido 56,25 millones de euros del segundo premio del Sorteo Extraordinario de Navidad que ha correspondido al número 4.074.
Alfaro, visiblemente emocionado, ha explicado a Efe que lleva nueve años al frente del establecimiento y que ya había vendido algún décimo del Gordo de 2018, pero en aquella ocasión a través de máquina.
En cambio, esta vez "se han repartido 450 décimos por ventanilla", aunque sin que él se hubiese quedado uno sólo de ellos, algo a lo que resta importancia.
"No tengo nada, pero lo importante es dar el premio", ha señalado, mientras explicaba que muchos vecinos se han acercado a la administración apenas se ha conocido que la lotería había tocado en Olot "y ya se ha acabado el cava".
A Alfredo Alfaro no le consta que parte de los décimos los haya adquirido alguna asociación o entidad para su posterior venta fraccionada.
La suerte de Alfaro ha sido la misma que, a menos de cien kilómetros, ha tenido la administración número 1 de Puigcerdà, ya en pleno Pirineo, en la frontera con Francia.
Allí, Luis Gil agotó las 45 series de las que disponía, 12 de ellas según ha relatado a Efe a través de la guardería 'El Drac Blanc' del municipio vecino de Ger.
