El ranking EngiRank ha situado a la UPNA como la séptima universidad de España en estudios de ingeniería, según la primera edición de esta clasificación internacional.
El listado lo ha elaborado la revista polaca Perspektywy en colaboración con la empresa Elsevier, con sede en Países Bajos. En Navarra, el resultado ha colocado a la universidad pública en el foco del panorama europeo.
En la clasificación institucional general, la UPNA ha ocupado el puesto 130 entre 330 universidades europeas de 36 países que han cumplido los criterios para entrar en el ranking.
Los resultados del ranking EngiRank se han presentado en dos grupos: el institucional y el de materias. En este segundo bloque se han analizado siete ámbitos de la ingeniería.
El bloque institucional ha agrupado indicadores en cinco áreas: investigación, innovación, Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), internacionalización y multidisciplinariedad. En investigación se han valorado, entre otros aspectos, las publicaciones científicas, su impacto y el ratio de citaciones.
En innovación, el ranking EngiRank ha medido la captación de fondos de convocatorias europeas, el número de patentes y las colaboraciones académicas con la industria. En ODS se ha tenido en cuenta la contribución al noveno objetivo, centrado en industria, innovación e infraestructura.
En internacionalización, la evaluación ha incluido coautorías y colaboración investigadora internacional, además de la pertenencia a una Universidad Europea. En el caso de la UPNA, se ha citado la alianza UNITA.
Por su parte, la clasificación por materias ha contemplado siete tipos: ingeniería química, civil, eléctrica/electrónica y de la información, medioambiental, de materiales, mecánica y médica. Para aparecer, el ranking ha exigido una contribución significativa en ingeniería y tecnología, con al menos un 30% de publicaciones de los últimos cinco años indexadas en Scopus.
Dentro de ese apartado, la UPNA ha destacado especialmente en ingeniería eléctrica y electrónica y en ingeniería mecánica, con posiciones que la han colocado por delante de muchas instituciones europeas. ¿Hasta qué punto este impulso puede reforzar el peso de la ingeniería en Navarra en los próximos años?