• sábado, 20 de abril de 2024
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El problema, Ana Iris, son los bancos

Entrega de unas llaves en una vivienda en construcción. Ayuntamiento de Pamplona.

La escritora manchega reivindica las condiciones de vida de sus padres como un sueño algo idealizado en el que, eso sí, había más confianza financiera

Los pactos de la Moncloa o el valor de la palabra dada

Imagen de los pactos de La Moncloa, con los líderes políticos de aquel momento.

Desde que el presidente del Gobierno anunció su voluntad de afrontar la reconstrucción del país mediante unos nuevos Pactos de la Moncloa se ha vuelto a hablar de la Transición, es decir, del período comprendido entre el 20 de noviembre de 1975, fecha de la muerte del general Franco, y el 6 de diciembre de 1978, día en que el pueblo español refrendó por amplia mayoría la Constitución que nos permite “vivir en paz y en libertad”, según palabras de Felipe González.

Los Coronapactos

Los Pactos de la Moncloa en la Transición española (archivodelatransicion.es)

Sea cual sea la denominación, este país necesita, de una vez por todas, unos grandes acuerdos de Estado entre partidos políticos.

1 de octubre de 1714

La Policía Nacional trata de evitar que los votantes entre en el colegio electoral. Efe

La sobreactuación de la guardia rajoyana concede el mejor regalo imaginable al discurso indepe: un hito actualizado y presente que se proyectará sobre el futuro.

La campaña de sus vidas

Cualquiera diría que nuestros políticos están cansados. Ha sido tener el decreto de convocatoria electoral y a todos les ha faltado tiempo para poner a toda marcha sus respectivos equipos.

Los impactos de la Moncloa

El presidente del Gobierno ha convocado a empresarios y sindicatos en la sucesión de contactos que ha establecido para abordar el pulso secesionista catalán.

Rajoy, Rivera: dos cabalgan juntos, tal vez no revueltos

Dije, en una comparecencia televisiva el miércoles, y también este jueves, que lamentaría que, con el encuentro este viernes con Albert Rivera, Mariano Rajoy diese por concluida su ronda de contactos con los principales líderes nacionales. 

La hermética puerta de La Moncloa

Menos mal que, al final, imperó un cierto sentido común y Rajoy y Sánchez almorzaron juntos: no debería ser noticia que el jefe del Ejecutivo y el líder de la oposición lo hagan, pero aquí y ahora, desgraciadamente, sí lo es, y hace falta un terremoto político para que ambos se encuentren.

La bronca de Aznar

Pues sí que están enfadados en el PP. Por más que oficialmente intentan quitar hierro a la irrupción de José Mª Aznar tirando de las orejas a los dirigentes del partido.