El portavoz de UPN en el Ayuntamiento de Pamplona, Enrique Maya, ha calificado de "rabieta de niño pequeño", la oposición del alcalde de Pamplona, Joseba Asirón, al plan de Salesianos.
"Si un alcalde quiere lo para, luego no quiere", ha afirmado Maya este viernes en rueda de prensa. "Además, no quiere porque ha firmado el convenio que dice que va a cobrar 3 millones de euros" y "según he leído, además va a cobrar 800.000 euros para equipar el Civivox", ha explicado.
"No me puedo ni creer que el alcalde diga que esto es un chandrío pero vaya a cobrar 800.000 euros más", ha manifestado. "Son rabietas de un alcalde que tiene que decir lo que dice pero no hace nada por pararlo", ha reiterado.
Enrique Maya ha asegurado que en su formación están "conformes" con el proyecto de Salesianos "porque UPN ha sido protagonista absoluto del plan" y porque el vicepresidente de Derechos Sociales, Miguel Laparra, "está encantado con el plan" porque "va a revitalizar el Ensanche y se apuesta de esta manera por un centro de Formación Profesional puntero acorde con el siglo XXI", ha afirmado.
El portavoz de UPN se ha referido también a la cláusula del convenio por la que se establece que al menos el 3 por ciento de los trabajadores que se contraten para las construcciones derivadas de este plan serán personas en exclusión social y, al menos, por 6 meses. "Es decir el 1,5% del dinero que se genere de mano de obra. Vender esto como la super cláusula social...", ha criticado.
Por su parte, el alcalde de Pamplona, Joseba Asirón, ha solicitado este viernes al Gobierno de Navarra la paralización de la subasta de las parcelas del solar de Salesianos anunciada a principios de este mes.
De esta manera, el Alcalde ha solicitado al Gobierno de Navarra que acceda a modificar el proyecto para adecuarlo al entorno del Ensanche, “para que no permita esta aberración y para que prime el futuro de la ciudad frente a los intereses económicos, legítimos pero parciales al fin y al cabo, de una congregación religiosa o de determinados promotores urbanísticos. El futuro de la ciudad no debe ser objeto de especulación ni de mercadeo, y creemos que las instituciones deben correr el riesgo de ingresar menos dinero, si es en aras de salvaguardar el planeamiento urbanístico de la ciudad”.
Así ha señalado que “estamos dispuestos a renunciar a las contraprestaciones pactadas por UPN con tal de evitar esta aberración urbanística a la ciudad. Hemos hablado de una reducción proporcional de esas contraprestaciones en función de la hipotética pérdida de valor del solar derivada de la modificación del Plan Especial”.
RAZONES DE ÍNDOLE POLÍTICA, SOCIAL Y LEGAL
Ha señalado que el proyecto, heredado de la pasada legislatura, “tiene un respaldo minoritario en la ciudad” y “tan solo los partidos que sustentaron el Régimen respaldan políticamente este sinsentido urbanístico, que sólo responde a la cultura del pelotazo. La mayoría política de esta ciudad rechaza de plano esta aberración que va a comprometer el futuro de muchas generaciones de esta ciudad, incluidos todos los partidos que sustentan al actual Gobierno de Navarra y al Ayuntamiento de Pamplona”.
Además, “dar luz verde a la operación de Salesianos significa contradecir expresamente el contenido de los acuerdos de gobierno que sustentan el cambio en el Ayuntamiento de Pamplona”. En ese sentido ha añadido que los argumentos de que “no se puede hacer otra cosa”, se crea cierta “inseguridad jurídica” o que habría que “hacer frente a unas hipotéticas compensaciones que muchos expertos ponen en duda, denotaría falta de capacidad para enmendar aquello que heredamos y que nos comprometimos a evitar”.
Entre las razones de índole social ha citado que “el vecindario de esa parte del ensanche se está posicionando mayoritariamente en contra de este proyecto que lo único que alimenta es la especulación a costa de la calidad de vida en el barrio”. Ha añadido que “no solo hablamos de vecindario, también profesionales de reconocido prestigio han salido a la luz para cuestionar, públicamente, tanto el proyecto en sí mismo como las razones que esgrime el Gobierno de Navarra para darle luz verde. Entre estos profesionales hay arquitectos, economistas, profesores universitarios... Todos, con diferentes palabras y argumentos, han pedido al Gobierno que recapacite”.
MODIFICAR EL PLAN ESPECIAL
Respecto a las razones de índole legal el alcalde ha señalado que “desde el punto de vista competencial, permitir este expediente por encima de acuerdos programáticos, de los partidos, de los vecinos, de los expertos y de la ciudad en general implica además dar carta de naturaleza a un PSIS que lo que hace es usurpar las competencias del Ayuntamiento de Pamplona para regular el desarrollo de la ciudad y hacerlo en beneficio exclusivo de una orden religiosa o de los posibles promotores que pujen por los derechos edificatorios de las parcelas.
Una cosa es convenir en que revertir el PSIS de forma absoluta contrae una suerte de indemnizaciones seguramente inasumibles para las arcas públicas y otra cosa es hacerlo en contra de la voluntad de este Ayuntamiento en aspectos que no generarían ninguna indemnización”.
El Plan Sectorial de Incidencia Supramunicipal (PSIS) de Salesianos fue aprobado en 2012 y el plan especial que lo desarrolla tres años después, en junio de 2015 con el anterior equipo de gobierno en funciones. Recoge en el solar de 13.961 m2 situado entre las calles Leyre, Media Luna, San Fermín y Aralar, once parcelas la mayoría de ellas destinadas a viviendas libres que se levantarán en bloques de entre 7 y 17 alturas. Además, dibuja un centro cívico de 3.000 m2, una calle peatonal que une Aralar y Media Luna prolongando la calle Teobaldos, dos plazas. Nasuvinsa ha publicado la licitación de la subasta de las parcelas en siete lotes, uno de ellos con uso hotelero.