El Ayuntamiento de Pamplona ha ampliado el servicio de bicicleta eléctrica con la instalación de 40 nuevas estaciones y la compra de 400 bicicletas adicionales. La decisión ha buscado mejorar la cobertura en todos los barrios y facilitar su futura extensión a municipios de la Comarca.
La Junta de Gobierno Local ha adjudicado a Ride On el suministro de estas nuevas bases y bicicletas por 847.000 euros, un proceso que deberá completarse antes del 30 de mayo de 2028. La empresa ofrecerá además una garantía de dos años desde la verificación completa de la instalación.
Los responsables municipales, el concejal Borja Izagirre Larrañaga y la técnica Alexia Canto Álvarez, han explicado que esta ampliación responde a la alta demanda y a la propuesta presentada a los 16 ayuntamientos de la Comarca el pasado 24 de octubre. El planteamiento parte de un estudio técnico encargado por la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona a la EMT de Madrid.
El análisis contemplaba dos opciones: redistribuir bases ya existentes o ampliar el número total. El Ayuntamiento ha descartado la reducción del sistema actual por su uso elevado y ha optado por aumentar la red para garantizar su compatibilidad y funcionamiento, como ya ocurrió en la ampliación financiada con fondos europeos Next Generation EU en 2024.
Coincidiendo con esta adjudicación, el Consistorio ha impulsado una campaña de descuentos dirigida a fidelizar abonados actuales y captar nuevos usuarios. La campaña 'Gracias' permitirá que más de 3.160 personas con abono anual a fecha 17 de noviembre disfruten de seis meses gratis, una medida dotada con un presupuesto de 55.317 euros.
Además, se ha activado la campaña ‘Batuz’ con 500 abonos anuales al 50% (17,5 euros) y 5 euros de regalo en el monedero. Esta promoción estará disponible hasta el 31 de diciembre o hasta agotar existencias, con un coste previsto de 11.350 euros.
El servicio de bicicleta eléctrica de Pamplona cuenta actualmente con 62 estaciones distribuidas por los barrios, cada una con entre 20 y 24 anclajes. Las nuevas 40 bases seguirán este mismo criterio de reparto. Las 400 bicicletas que se incorporan se sumarán a las 640 existentes y deberán cumplir requisitos como velocidad máxima de 25 km/h, GPS integrado, materiales anticorrosivos y diseño antivandalismo certificado.
Las bicicletas tienen un peso de 23,9 kilos, batería centrada bajo el sillín para mejorar la estabilidad, motor en la rueda delantera y ruedas de 26” con reflectores para reforzar la visibilidad. Todo el montaje y transporte, tanto al almacén municipal como a las ubicaciones definitivas, correrá a cargo de la adjudicataria.
El servicio, gestionado por Ride On por razones de interés público, supera actualmente los 60.000 usuarios y contabiliza más de un millón de viajes desde su puesta en marcha en 2021.
