Pamplona inauguró una oficina para evitar que las disputas entre vecinos acaben en los tribunales.
La Oficina de Mediación Comunitaria de la Policía Municipal de Pamplona ha intervenido desde octubre de 2024 en la resolución de seis conflictos vecinales, logrando resolver con éxito cuatro de ellos, mientras que otros dos continúan en proceso.
Este recurso, puesto en marcha por el Ayuntamiento, busca ofrecer una alternativa voluntaria y gratuita para abordar problemas de convivencia, ruidos, olores, obras, salubridad, mascotas o uso de espacios públicos. El objetivo principal es evitar que estos conflictos acaben en los tribunales, promoviendo acuerdos consensuados entre las partes implicadas.
Hasta la fecha, el equipo de mediación, compuesto por seis agentes de la Policía Comunitaria, ha conseguido que las partes enfrentadas alcancen acuerdos formales en cuatro casos.
Los conflictos resueltos se referían principalmente a ladridos de perros y molestias ocasionadas por diferentes tipos de ruidos, así como problemas de convivencia entre vecinos agravados por una mala o escasa comunicación.
En estos casos, las partes implicadas han logrado pactar soluciones satisfactorias, garantizando una convivencia más armoniosa.
En cuanto a los dos casos restantes, uno de ellos está pendiente de una nueva sesión de mediación para tratar de alcanzar un acuerdo. El otro ha sido paralizado debido a que una de las partes presenta problemas de salud mental, lo que impide el normal desarrollo del proceso de mediación, según ha indicado el Ayuntamiento.
Además, la oficina ha llevado a cabo dos entrevistas previas con personas interesadas en el servicio, aunque aún están a la espera de que ambas partes acepten someterse al proceso de mediación.
El acceso al servicio de mediación comunitaria puede realizarse a través de varias vías. Los vecinos pueden solicitar la intervención directamente a los agentes de Policía Comunitaria de cada barrio, quienes, a través de sus patrullajes semanales, pueden conocer las problemáticas existentes y derivar los casos a la oficina de mediación.
También se puede acceder al servicio mediante una solicitud directa al Ayuntamiento o a la Jefatura de Policía Municipal. Además, otras áreas municipales pueden derivar a las personas al recurso si consideran que el conflicto puede resolverse mediante mediación.
El servicio es completamente gratuito y voluntario, lo que implica que todas las partes implicadas deben estar dispuestas a participar y mostrarse receptivas a la solución que se proponga. En cada caso, el equipo valora si la situación es susceptible de mediación o si debe resolverse por vías legales.
El equipo de la Oficina de Mediación Comunitaria está formado por agentes de la Policía Comunitaria que cuentan con titulación universitaria o Formación Profesional de Grado Superior, además de una formación específica en mediación.
Cada caso se asigna a una pareja de agentes que actúan como instructores de la causa, recabando toda la información necesaria y reuniéndose con todas las partes implicadas. El objetivo es promover el diálogo y facilitar la búsqueda de soluciones acordadas.
Mensualmente, el equipo de mediación se reúne con una persona asesora externa experta en Mediación y Gestión de Conflictos, con el fin de compartir experiencias y evaluar las intervenciones realizadas.
Además, ya se ha establecido un vínculo de colaboración con el Servicio de Mediación e Intervención Comunitaria Intercultural del Gobierno de Navarra, con el propósito de sumar esfuerzos en la gestión de conflictos en el ámbito comunitario.
Con este recurso, el Ayuntamiento de Pamplona refuerza su compromiso con la convivencia pacífica y la resolución de conflictos vecinales de manera dialogada, evitando que situaciones cotidianas desemboquen en problemas legales.
