Un simple paseo por el pueblo es suficiente para constatar que prácticamente en cada esquina, en cada lienzo o mural, hay pintadas y referencias de apoyo a asesinos y presos de ETA. Un pueblo que sufrió en carne propia el terrorismo, con el asesinato de quien fuera su alcalde en 1979. Un pueblo que todavía jalea y aplaude al asesino. Que le homenajea. Que nombra hijo predilecto a uno de sus asesinos y que la izquierda abertzale, representada por el sindicato proetarra LAB, le coloca en el consejo de administración de una empresa regada con millones de euros de ayudas públicas con el consentimiento del gobierno de la socialista María Chivite.
Es Echarri Aranaz, el mismo pueblo que esta semana se ha negado siquiera a debatir una moción presentada por el único concejal que no es de Bildu en el ayuntamiento y que representa no sólo a los que le votaron, sino a todos aquellos que no fueron a las urnas por miedo.
Se trata de una moción presentada por el edil de UPN, Juan Frommknecht, en la que pedía destinar una partida para borrar las pintadas proetarras, pero la mayoría absoluta de la alcaldesa, María Sáez de Albéniz (EH Bildu) se negó, siquiera. a debatir, rechazando la urgencia de la moción.
Según explica Frommknecht "el paisaje urbano de Etxarri Aranatz no es propio de una democracia, ni facilita una convivencia plena entre los vecinos. Siguen existiendo una gran cantidad de pintadas referentes a distintos asuntos: a favor de la banda terrorista ETA, a favor de los presos de dicha organización, en contra de la Guardia Civil, en contra de la Iglesia, amenazas contra una jueza... que suponen una anormalidad democrática y un importante freno para la normal convivencia".
No es la primera vez que el edil exige a la alcaldesa que ordene borrar estas pintadas, pero la alcaldesa, al parecer, se siente cómoda entre pintadas de apoyo a asesinos.
El regionalista ha denunciado además que es habitual que se repartan panfletos pidiendo a los ciudadanos que hagan "un esfuerzo" económico para ayudar a los etarras asesinos conforme la política de pactos de Pedro Sánchez con Bildu consigue liberar pistoleros, carceleros y extorsionadores.
"UPN es absolutamente contraria a cualquier cesión de espacio público para la realización de colectas o actos a favor de personas condenadas judicialmente por cometer los más graves delitos contra seres humanos", denuncia Frommknetch.
"UPN es radicalmente contrario a la cesión de locales públicos, como el frontón del colegio, para celebrar un concierto en el que se buscaba "aligerar la carga"; de los miembros de ETA. Bajo el título "Aligerando la carga con melodías", el acto reivindicó la excarcelación de los presos de esa banda".
En dicho concierto se leyó una carta del etarra Joanes Larretxea, condenado por su participación en el asesinato del empresario Ignacio Uría.
La moción presentada por UPN apelaba directamente a los ediles proetarras. "Ustedes tienen una inmensa mayoría en este ayuntamiento. Por eso tienen igualmente una inmensa responsabilidad. Defiendan sus ideas, aunque muchos no las compartan, al igual que está claro que la inmensa mayoría del pueblo no entienden las mías, y lo respeto profundamente. Pero no olviden ni a esas personas que votaron distinto a lo que ustedes piensan, y que me honro en representar, ni a esas muchas personas que, sin pensar ni como ustedes ni como yo, no acudieron a votar, pero están en contra de este paisaje impropio de un pueblo democrático en tiempos de paz".
Por eso, la moción pedía acometer "el borrado de todas las pintadas de la localidad, sean del contenido que sea, antes del verano, incorporando las partidas oportunas en el presupuesto municipal".
Asimismo, solicitaba que el Ayuntamiento de Echarri Aranaz se comprometiera "a no ceder espacios públicos para actos o actividades que puedan suponer un mayor dolor a las víctimas de ETA" y a ""dar pasos decididos por la normalización democrática de la localidad y la sana convivencia de todos sus vecinos".
No sólo no se votó, sino que ni siquiera se debatió porque Bildu no lo consideró urgente.
También se aprobaron los presupuestos de la localidad con el rodillo que representa Bildu en Echarri. Se aprobaron sin dar una sola explicación al único edil que no es de Bildu y sin convocarle a ni una sola reunión explicativa.
