La presidenta de Unión del Pueblo Navarro (UPN), Cristina Ibarrola, ha afirmado hoy que la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, “reinó gracias a Santos Cerdán y caerá por él”. Ha denunciado que Cerdán urdió gobiernos “para colocar personas en puestos clave y dar continuidad a esa presunta trama corrupta” y que Chivite “dejó hacer, miró para otro lado”.
Durante el inicio del consejo político celebrado por UPN en el Hotel Castillo de Gorraiz, Ibarrola calificó de “sinsentido” al Gobierno de Chivite al hilo del nuevo informe de la UCO de la Guardia Civil, que confirmó que “hay Caso Belate”. En su intervención, añadió que “ser presidenta de Navarra gracias a los chanchullos que necesitaba hacer Cerdán para presuntamente seguir robando a través de mordidas de obra pública, no era gratis”.
Ibarrola añadió que el Ejecutivo foral que preside Chivite es “un gabinete de crisis, un grupo de supervivencia política”, y subrayó que “un fin de etapa prolongado artificialmente del que ya vislumbramos su extinción definitiva”. Según la dirigente regionalista, “viven pendientes de próximas novedades en la investigación de una trama corrupta, y eso les impide centrarse en dar soluciones reales a los problemas de los navarros”.
La presidenta de UPN reivindicó que su formación fue la única que “sin hacerlo público, tuvo el valor y el coraje de denunciar la adjudicación de Belate ante la Guardia Civil”. Por eso, afirmó sentirse “orgullosa de ser los únicos que podemos decir alto y claro que no tenemos un solo caso de corrupción”. También anunció que UPN, como acusación popular, ha solicitado 30 años de prisión para Koldo y Ábalos, y que en la vista del 27 de noviembre pedirán su ingreso en prisión provisional “por el evidente riesgo de fuga ante la petición de penas tan elevadas”.
Ibarrola lamentó que “no se puede manchar más la imagen de Navarra”, y leyó en su discurso recortes de prensa con términos como “cobro de comisiones ilegales”, “sobrecostes” o “financiación irregular del PSOE”. Tras repasar esos titulares, manifestó: “Parece que hablo de Belate, ¿verdad? Pues, aunque parece Belate, lo que os acabo de leer son titulares y recortes de prensa del caso Urralburu y Otano en los años 90. La historia se repite”.
Por otra parte, aseguró que la única diferencia entre los años 90 y el actual momento político es que “Izquierda Unida y Herri Batasuna denunciaron la corrupción socialista sin matices”. Añadió que entre aquellos protagonistas estaban Félix Taberna y Adolfo Araiz, “los mismos que hoy callan, justifican, minimizan o piden prudencia”.
En materia de políticas concretas, Ibarrola mencionó que en UPN “no nos conformamos con la Navarra de hoy” y destacó que su formación representa “soluciones reales” para problemas como la renta garantizada, las listas de espera en sanidad, la vivienda o la inseguridad. Sobre este último tema puso especial énfasis en que “la seguridad es fundamental para vivir en libertad” y sostuvo que los “datos de criminalidad” son cada vez más preocupantes.
Para terminar, adelantó algunas de las medidas de los foralistas en materia de seguridad: aumentar la presencia policial en la calle, mejorar la coordinación entre cuerpos, invertir en equipamiento policial y cámaras de vigilancia, y tomar decisiones basadas en datos.
