Los bares y restaurantes de toda Pamplona triunfan, en su mayoría, durante la semana de San Fermín. Muchos tienen ya sus mesas prácticamente ocupadas y los clientes buscan casi desesperados alguna mesa o habitación libre de última hora.
Es el caso del Hostal y Cafetería Rodas, donde prácticamente tienen todo ocupado para estas fechas, aunque todavía esperan a muchos clientes que llegarán en San Fermín. Muy cercano a El Corte Inglés, cada día es un trasiego de personas que aprovechan su magnífica barra para tomar un café y un pincho de algunas de sus variadas tortillas. Para el 6 de julio, no queda ni hueco para almorzar, pero todavía tienen espacio para otros días de fiestas con su plato sanferminero.
Goretti Andueza Betelu es la dueña del Hostal y Cafetería Rodas en la calle Estella 10. En sus inicios, ellos no eran ni un hostal ni estaban en esa zona de Pamplona. "Nosotros teníamos una discoteca que se llamaba Rodas, en Huarte. La llamamos Rodas porque tenía forma de anfiteatro griego y eso nos llevó a elegir un nombre relacionado con Grecia, que fue la isla de Rodas. Además, era fácil de recordar y con gancho", recuerda la dueña.
"Estuvimos en la discoteca tres años hasta que hubo un comprador que se empeñó en que la quería. Se la vendimos y dos años después compramos esta cafetería. Y como éramos conocidos en Pamplona como los del Rodas, le pusimos a este local el mismo nombre. El primer año no funcionó muy bien, pero con el tiempo fuimos creciendo", continúa Goretti Andueza.
La evolución de esta cafetería se basó mucho en su experiencia trabajando en la discoteca. "Como nos conocían por la discoteca, la gente joven que hacía la mili en donde antes estaba la Cruz Roja venía mucho a tomarse algo. Eso hizo que de día trabajáramos como una cafetería normal, y de tarde lo convertíamos más en una discoteca, con música alta y muchas luces", cuenta la gerente.
Ese desarrollo del Rodas no frenó allí porque tiempo después se lanzarían a por una nueva idea de negocio. "Salió un piso a la venta justo encima de la cafetería. Vi el cartel y me interesé. Y cuando entré al piso, vi que tenía 5 habitaciones con 5 baños, más una cocina y una sala. En el momento lo quise comprar y transformarlo en un hostal. Al final me salió bien la película", explica. Actualmente, todas las habitaciones están nuevas y reformadas.
La creación del hostal tuvo mucho éxito y, según Andueza, "está casi todo el año lleno. Puede que durante San Fermín nos quede alguna habitación, pero por estas fechas los precios se triplican. Durante el año, no estamos llenos completamente, pero sí en un 90%. No es muy grande, pero creo que es coqueto".
A pesar de su popularidad, en San Fermín les cuesta llegar a más clientes. "Parece mentira que estemos tan cerca del centro de Pamplona y la gente hasta aquí no llegue. Puede venir un millón de personas a Pamplona y no darse cuenta de que existe esta cafetería. Porque no es un sitio de paso", menciona la dueña.
No obstante, hay un evento durante San Fermín que es muy importante para su negocio. "Tenemos que coger fuerza cuando empiezan los fuegos artificiales, que es el único gran del año por el que pasa la gente por aquí. En ese momento preparamos nuestros bocatas caseros. Los cobramos a 7 euros y los hay de jamón y pimiento, de lomo y queso o de tortilla de patata", añade Goretti Andueza.
También han ideado un plato especial para sus clientes ahora que se acerca San Fermín. "Hacemos un plato único para todo el mundo. Si son 25 comensales pues preparamos 25 de ese plato. De esa manera nosotros no nos comemos la cabeza y nos resulta más fácil. El plato lleva de todo: jamón, lomo, tomate, patatas y chistorra. Y tiene un precio único de 22 euros, con bebida incluida", explica la gerente.
A pesar del éxito en San Fermín, las fiestas añaden un problema para ellos. "Conseguir personal para trabajar en hostelería es complicado porque no hay gente para trabajar. Es muy difícil encontrar personas para la cocina y para servir, pero vamos a aguantar bien", asegura.
De igual manera, Goretti Andueza ve el sábado día 6 de julio con optimismo, a pesar de la avalancha que se vaticina en Pamplona: "Dicen que el día 6 va a ser una locura por ser sábado, pero yo creo que como todos trabajan ese día al máximo, estamos más que preparados para lo que va a llegar. Si fuera el día 6 en viernes, sería otra cosa, pero así se siente como si hubiera un día menos de San Fermín", finaliza Goretti Andueza.
