El calor ha llegado con fuerza a Navarra en plena recta final de mayo, con temperaturas más propias del mes de julio que de la primavera.
En Pamplona, algunas piscinas han decidido adelantar su apertura, coincidiendo con un episodio extraordinario de altas temperaturas que afecta a buena parte del país y que dejará en la Comunidad Foral más de 30 ºC durante varios días consecutivos.
Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), España afronta hasta el domingo 1 de junio el pico máximo de este episodio cálido.
Las máximas rozarán este jueves los 40 ºC en el valle del Guadalquivir y superarán los 35 ºC en el nordeste, centro y sur peninsular. En Navarra, se prevén hasta 33 ºC este viernes en puntos del sur de la comunidad y en zonas del norte, como la capital, los termómetros alcanzarán los 31 ºC, con cielos despejados y ambiente muy seco.
La AEMET ha activado el aviso amarillo por altas temperaturas en la comunidad, un nivel que implica riesgo para actividades al aire libre, especialmente en las horas centrales del día. La situación también se repite en otras regiones como Aragón, Cataluña, Extremadura, Galicia o La Rioja.
La estabilidad atmosférica se mantendrá durante jueves y viernes, con cielos prácticamente despejados, mínimas suaves y máximas por encima de los 30 ºC en buena parte del territorio.
Este jueves, por ejemplo, Pamplona ha alcanzado los 31 ºC, y para mañana viernes se espera incluso un ligero ascenso, con 33 ºC de máxima en la capital y valores similares en Tudela, Estella o Sangüesa.
El calor persistirá hasta el sábado 31 de mayo, con cielos poco nubosos y temperaturas cercanas a los 30 ºC. Sin embargo, la situación empezará a cambiar el domingo, cuando se espera un descenso de las temperaturas y la llegada de lluvias a la comunidad. La previsión apunta a cielos muy nubosos y precipitaciones que podrían ser generalizadas en toda Navarra, con una probabilidad del 85% al 100% de lluvia, según los últimos datos de la AEMET.
El lunes 2 de junio continuará el tiempo inestable, con máximas más suaves —en torno a los 28 ºC— y una cota de nieve que, aunque aún lejana, bajará hasta los 2.400 metros.
En resumen, Navarra vive estos días uno de los arranques de verano más tempranos de los últimos años, con temperaturas récord para la época y un respiro previsto a partir del domingo, cuando las lluvias y el descenso térmico pondrán fin, al menos de forma temporal, a este episodio de calor excepcional.
