SOCIEDAD
CaixaBank anuncia que eliminará todas las cláusula suelo de todas sus hipotecas
La entidad señala que la medida afectará a unos 200.000 créditos y que tendrá para la entidad un impacto anual de 220 millones de euros.
La entidad señala que la medida afectará a unos 200.000 créditos y que tendrá para la entidad un impacto anual de 220 millones de euros.
CaixaBank ha anunciado que eliminará todas las cláusulas suelo de las hipotecas de sus clientes particulares, una medida que afectará a unas 200.000 créditos y que tendrá para la entidad un impacto anual de 220 millones de euros.
Esta decisión afectará a aproximadamente un 15 % de los 1,3 millones de hipotecas que tiene activas CaixaBank, procedentes principalmente de las entidades que el banco catalán ha absorbido en los últimos años, como Banca Cívica o Caixa Girona.
El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha destacado que el grupo ya ha eliminado de forma "proactiva" el 94 % de las hipotecas afectadas y que en los próximos meses se suprimirán las cláusulas de los créditos restantes.
La mayoría de entidades financieras han comercializado en los últimos años préstamos con cláusulas suelo, que impiden a los clientes beneficiarse de determinadas rebajas del euríbor.
Algunas de estas entidades, como BBVA, decidieron tiempo atrás suprimir las cláusulas suelo, mientras que otras, como CaixaBank o Banco Sabadell, las seguían manteniendo, pese a las críticas de las asociaciones de consumidores.
Durante la presentación de los resultados económicos de cierre del tercer trimestre, Gortázar ha explicado que las hipotecas con cláusula suelo que tiene la entidad representan "un porcentaje relativamente pequeño" de la cartera crediticia, ya que CaixaBank "no había fomentado" las cláusulas suelo, sino que las ha incorporado a su cartera como consecuencia de las adquisiciones que ha llevado a cabo en los últimos años.
Entre 2013 y 2014, ha explicado el consejero delegado, CaixaBank revisó "caso por caso" estas hipotecas para asegurarse de que "no había defectos de transparencia", como pedía el Tribunal Supremo, y, en tal caso, corregir la situación eliminando la cláusula suelo.
A principios de 2015, CaixaBank se acogió al código de buenas prácticas del sector financiero, que contempla la obligación de eliminar la cláusula suelo en los supuestos que afecten a personas desfavorecidas o en situación de vulnerabilidad.
CaixaBank, ha comentado Gortázar, empezó quitando estas cláusulas a estos colectivos, pero después, aplicando un criterio "más expansivo" y teniendo en cuenta que este asunto ha sido "fuente de reclamaciones y de fricción comercial", decidió suprimirlas en todos los casos.
"Se ha hecho de manera proactiva e individualizada. Ha sido un sacrificio económico importante para CaixaBank, pero ha sido una buena medida que beneficia a un grupo de clientes que venía generalmente de otras entidades", ha manifestado.
La supresión de la cláusula suelo tendrá para el banco que preside Isidre Fainé un coste anual de 220 millones de euros.
Gortázar ha precisado que el 80 % de este coste ya se refleja en los resultados económicos de la entidad, por lo que "no habrá que penalizar cuentas futuras".
CaixaBank no aplicará más cláusulas suelo a sus hipotecas, aunque no devolverá los importes cobrados hasta ahora a sus clientes particulares, a no ser que así lo obligue un juez, al entender que estos importes no se cobraron de forma "inadecuada".
"Si hay una sentencia judicial habrá que estudiarse y, según su contenido, actuar de una manera u otra", ha comentado Gortázar, que ha insistido en que CaixaBank ha hecho "un ejercicio proactivo, generoso, de facilitar a una base de clientes una situación económica mejor por una decisión propia y no impuesta".