La medida se debe a la falta de profesionales en el servicio de Ginecología y Obstetricia de este centro hospitalario.
El Departamento de Salud del Gobierno de Navarra ha informado de que desde este jueves, 7 de diciembre, las pacientes embarazadas del Área de Salud de Estella que estén de parto serán atendidas en el Hospital Universitario de Navarra en Pamplona y en el Hospital Reina Sofía de Tudela de forma temporal. De esta forma, el hospital estelllés pierde un servicio fundamental para las madres de la zona. Y se pone de relevancia la mala gestión del Gobierno de María Chivite en el ámbito de la Salud.
El motivo por el que el Hospital García Orcoyen de Estella (HGO) "no puede asumir los partos de manera temporal" es "la falta de 5 profesionales de los 8 que forman el servicio de Ginecología y Obstetricia".
Actualmente, de las ocho plazas de Ginecología del HGO, cuatro están desempeñadas por profesionales en situación de baja médica (una de ellas prevista de larga duración conocida en los últimos días), una en reducción de jornada, dos en jornada completa y una plaza vacante.
Hasta el momento, "esta ausencia de varios profesionales por motivos médicos se ha solventado con el gran esfuerzo y compromiso del resto del servicio disponible" que, además, está trabajando en la reestructuración del servicio "para mantenerlo en las mejores condiciones en el largo plazo".
También se está contando con "el esfuerzo de reorganización" de actividad en el Hospital Universitario de Navarra (HUN) para la cobertura voluntaria de las guardias de Ginecología del HGO durante los últimos meses por parte de varios profesionales del HUN.
Sin embargo, la baja de una profesional más, conocida hace unos días, y la prolongación de manera indefinida de otra baja que preveía incorporarse esta semana, "supone un cambio temporal en la cartera de servicios para garantizar la calidad y seguridad de todas las pacientes, ya que no se pueden trasladar más profesionales del HUN sin quedar éste descubierto".
De manera temporal, este cambio "afecta fundamentalmente a los partos, prestación que requiere todos los días de dos profesionales disponibles". De esta forma, las pacientes del Área de Salud de Estella que a partir del jueves día 7 estén de parto serán derivadas a Pamplona.
Las pacientes que residan cerca del Hospital Reina Sofía de Tudela también podrán acudir allí, si así lo prefieren. El Hospital García Orcoyen "se reorganizará" para atender el resto de la cartera de servicios de Ginecología y Obstetricia y se reforzará el transporte sanitario para los traslados que surjan. Para este próximo mes están previstos alrededor de 25 partos en la zona de Estella.
El consejero de Salud, Fernando Domínguez, ha "lamentado tener que tomar esta decisión" cuando "estábamos trabajando en un plan a largo plazo mano a mano con el servicio para solventar un problema que lleva arrastrándose desde hace años".
Sin embargo, "la inesperada baja médica de una de las profesionales y la prolongación de otra nos ha supuesto un cambio de planes temporal, además de una preocupación por el estado de salud de una profesional".
"La seguridad y calidad asistencial de nuestros pacientes está por encima de todo y en este momento la derivación es la solución más responsable y coherente con la situación que tenemos. Desde el Departamento y la gerencia del Servicio Navarro de Salud - Osasunbidea estamos trabajando para que la atención de los partos se retome en el menor tiempo posible", ha asegurado.
Las reacciones políticas a esta decisión del Gobierno de Navarra, liderado por María Chivite, no se han hecho esperar. En ese sentido, los regionalistas de UPN han criticado que el Hospital García Orcoyen de Estella deje de atender los partos a partir de este jueves.
UPN ha mostrado su “profunda indignación” al conocer el cierre del servicio de partos del Hospital García Orcoyen en Estella, mucho más cuando hace solo unos días el Departamento de Salud había anunciado que no iba a ocurrir, lo que “es una muestra más de la improvisación y los bandazos con los que viene actuando el Departamento”. Además, los regionalistas han denunciado que “la desidia y la incompetencia del Departamento de Salud en el Área de Estella está ocasionando importantes perjuicios a los vecinos y vecinas de la zona”.
Así, desde UPN han criticado que “a los malos datos registrados en las listas de espera en el Área de Estella se une ahora la decisión de suspender los partos”. “No es de recibo que, con el presupuesto en Salud más alto de la historia del Gobierno de Navarra, la nefasta gestión tenga este tipo de repercusiones en la ciudadanía, que se merece un servicio sanitario a la altura de los impuestos que paga, viva donde viva” han afirmado. Y han añadido: “Esperemos que no sea este el progresismo al que nos vamos a tener que acostumbrar los ciudadanos con este Gobierno”.
UPN ha denunciado que “el problema de la falta de personal facultativo de ginecología en la zona viene de lejos. Hace muchos meses que se viene denunciando que el servicio de ginecología está bajo mínimos y, desgraciadamente, desde el Departamento de Salud no se ha implantado ninguna medida para solucionar el problema”.
Para UPN “el cierre del servicio de partos es la punta del iceberg, porque la situación extrema de falta de facultativos - de los ocho especialistas, únicamente se encuentran disponibles a día de hoy uno y medio – ha tenido otras consecuencias gravísimas, como que las mujeres de la zona de Estella esperen actualmente casi 3 meses más a ser atendidas en ginecología de lo que esperaban en 2018”.
Desde el partido regionalista subrayan que “los problemas relacionados con la gestión de los recursos humanos del Área han sido constantes en los últimos años y esto se ha visto reflejado en un descenso de la actividad sanitaria en algunos servicios, que repercute negativamente en la espera de los ciudadanos a ser atendidos, hasta el punto de llegar a tener que trasladarse a Pamplona para recibir atención sanitaria que siempre se había recibido en Estella”.
Así, señalan que “llama la atención que el Área de Salud de Estella sea en la única en la que no se ha contratado personal sanitario eventual desde 2018”, haciendo alusión a datos contenidos en informe publicado por la Cámara de Comptos sobre listas de espera. En este mismo informe también se recoge que el Área de Salud de Estella ha perdido dos facultativos especialistas desde 2018, cuando Pamplona y Tudela han ganado 86 y 14 respectivamente, y ello a pesar de que el Área de Salud de Estella ha incrementado su población en un 3%, mismo incremento que ha tenido Pamplona.
Los regionalistas han incidido en que “los datos son claros en relación al descenso de algunas actividades desde 2018, con una reducción de un 18% del número de primeras consultas, un 24% de consultas sucesivas y un 7% de hospitalización a domicilio. Las intervenciones quirúrgicas han bajado un 27%, pasando de las 3.400 que se hacían en 2018 a las 2.400 que se hicieron en 2022. En consecuencia, el aumento de derivaciones a la sanidad privada es evidente, con un incremento de más del doble de derivaciones de lo que se hacía en 2018”.
Asimismo, UPN ha destacado “la falta de equidad entre Áreas de Salud que también se menciona en el informe de la Cámara de Comptos, y que señala que los ciudadanos de Estella deben esperar más para una primera consulta (75 días frente a los 70 de Pamplona y los 41 de Tudela), siendo el área donde más se ha incrementado el tiempo de espera desde 2018, concretamente un 226%”.
Además, han añadido que “para pruebas diagnósticas de igual complejidad, también en Estella se espera más en comparación a Pamplona o Tudela. De hecho, en Estella se tiene que esperar cinco meses para una colonoscopia que en Pamplona y Tudela se realiza en dos meses, o cuatro meses para una mamografía, que en Pamplona se realiza en tres meses y en Tudela en uno”.
“Ante tal situación, son numerosas las personas que están trasladado su malestar con la situación del Área de Salud de Estella. Desde 2018, las quejas y reclamaciones en el Área de Salud Estella se han incrementado en un 36%, pasando de las 1.730 de 2018, a las 2.350 de 2022”, han desvelado.
