Con la llegada del verano, las temperaturas tienden a subir. Aunque Navarra es un territorio más fresco, el calor se nota bastante. Afortunadamente, hay ciertos lugares en la comunidad foral que están pensados para refrescarnos como es debido. Esos lugares no son otra cosa que los lagos y piscinas fluviales repartidas por Navarra.
Uno de esos lugares privilegiados y perfectos para sobrevivir durante una ola de calor es Uztárroz. Esta pequeña localidad del valle del Roncal tiene unos 140 habitantes y se encuentra a 104 km al norte de Pamplona.
En el pasado, como Uztárroz pertenecía al conjunto de villas del Roncal, todos los años debía un tributo o diezmo a la corona de Navarra. Ese gesto se acabó en 1412 cuando las villas del Roncal se ganaron la hidalguía colectiva. Después de ese cambio, los vecinos del Roncal tuvieron que mejorar sus defensas contra los posibles ataques de sus otros vecinos: los franceses.
Esas defensas resultaron útiles cuando, en 1794, los franceses mandaron unos 300 súbditos a atacar España a través de Uztárroz. Los defensores de Uztárroz lograron despachar a los franceses tras 3 horas de contienda, pero más tarde penetraron de nuevo en el valle de Salazar, asolando la comarca.
Con el tiempo y gracias a su gran desarrollo en las actividades ganaderas, Uztárroz creció en población muy considerablemente. Predominan las casas con tejado a dos o cuatro aguas, reformadas en su mayor parte en el siglo XIX. Abundan portadas de medio punto, labores de talla popular del siglo XVIII y escudos con las armas comunes del valle de Roncal.
En Urtárroz destaca dos edificios religiosos: la iglesia de Santa Engracia y la ermita de Nuestra Señora del Patrocinio. La iglesia de Santa Engracia se erigió en el siglo XVI y se conserva un órgano barroco del año 1738, el cual está considerado como el mejor órgano de toda Navarra. A pesar del paso del tiempo y algunas restauraciones, el instrumento sigue manteniendo su diseño original.
La ermita de Nuestra Señora del Patrocinio data de mediados del siglo XVIII y se encuentra en frente al casco urbano y junto al cementerio del municipio. Al exterior muestra muros enlucidos y en la puerta de arco de medio punto que tiene inscripción “año 1756” en la clave. Resalta también el retablo rococó en el que la Señora del Patrocinio cubre a un grupo de orantes con su manto.
Otras estructuras que vale la pena mencionar de Urtárroz son el puente medieval a la salida del pueblo, la Casa Julián-Marco y la Casa Consistorial, así como la Casa Pilart y la Casa Krutxaga.
A través de Urtárroz pasa un río con el mismo nombre. Durante la época veraniega, se colocan unos tablones de madera transversales junto al puente, que embalsan el agua y permiten disponer de la profundidad necesaria para el baño. El agua del río suele mantenerse entre los 14ºC y los 17ºC.
Para llegar hasta esta piscina fluvial, es necesario conducir por la carretera NA-140. A la entrada del pueblo se encuentra un pequeño aparcamiento en frente de las primeras casas que no queda lejos del puente que se usa para represa el agua.
