Estella ha marcado este 2 de agosto el inicio de sus fiestas más importantes bajo las figuras de San Andrés y la Virgen del Puy. El lanzador del cohete este año ha sido el rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza, quien ha deseado unas felices fiestas a toda la población de Estella.
Al explotar el cohete, algunos que estaban en la plaza viendo la celebración de inicio de las fiestas se han marchado con sus flotadores al inicio del río Ega. Al igual que es tradición en Estella no vestirse de blanco y rojo antes de la salida de los gigantes, también es costumbre que los jóvenes bajen en flotador por el río.
Hay quienes son más rápidos bajando que otros, pero Luis, Sergio e Igor han podido ser de los primeros en llegar hasta abajo. "Aunque hoy ha hecho bastante fresco, eso no nos ha frenado en lo más mínimo para lanzarnos al río y bajar con la corriente", explica Sergio.
Los tres jóvenes de 18 años son de Estella de toda la vida y todos los años se reúnen para bajar por el río Ega el primer día de las fiestas de su pueblo. "Con este frío y viento que ha hecho hoy, una persona cualquiera se habría echado atrás y no se habría lanzado, pero nosotros no somos unos cobardes. Hay que seguir con nuestra tradición", cuentan los tres.
"Llevamos muchos años bajando y ya llega un punto en que si no lo haces da mucha pena. Pero ha sido divertido, no nos arrepentimos. Además, mientras estábamos bajando nos hemos encontrado una pelota y un flotador por ahí y nos los hemos llevado río abajo", comentan entre risas.
Después de un refrescante baño en el río, a los tres jóvenes se les abre el apetito. "Ahora nos vamos a comer del tirón. Nos secaremos el agua como podamos y subiremos a un bar de aquí cerca a comer un poco", añade Luis.
Este es solo el inicio de sus planes ya que durante la semana que duran las fiestas tienen algunos objetivos claros. "Para estas fiestas tenemos planeado salir todos los días. También llegar tarde a casa, todos los días si puede ser. Y por supuesto ir a ver los encierros y el Grand Prix, a ver si ganamos", aseguran los tres estelleses.
Sin embargo, puede que sus planes de comer hoy se hayan frustrado por la fuerte tromba de agua que ha caído al poco de iniciarse las fiestas. Ellos han tenido suerte de salir del agua antes de que empezara a llover, pero otros bañistas que bajaban por el río han tenido que poner pies en polvorosa y volverse tiritando a casa.
