El 3 de febrero, se celebra en todo Navarra una festividad que impregna las localidades con un olor especial. Es el olor a San Blas, a roscos, a tortas de txantxigorri, a caramelo bendecido... Para muchos pueblos de Navarra es un día grande en el que se realizan diferentes actos, en Pamplona decenas de puestos se reúnen en la plaza de San Nicolás con los roscos bendecidos.
En Burlada también se celebra San Blas y, además, de una forma muy especial gracias a un grupo de mujeres voluntarias. En concreto, la Asociación de Mujeres de Burlada realiza rosquillas desde hace más de 30 años para después repartirlas gratuitamente tras la salida de la misa de las 19:30 horas. Puedes ver la galería con todas las fotos de la preparación en este enlace.
Las voluntarias de la Asociación de Mujeres de Burlada se reúnen el 2 de febrero y durante todo el día elaboran hasta 100 kilos de rosquillas. Los ingredientes los proporciona el Eroski a través de una subvención y también colabora la Casa de Cultura de Burlada.
Son más de 20 las mujeres que ayudan a realizar esta deliciosa receta. Se reparten cada una las tareas. "Unas cocinan, otras limpian y otras adornan las cestas o cosen tapetes", indica María Luisa Orduña, dirigente de la Asociación de Mujeres de Burlada. Una a una, van colaborando con toda la ilusión de saber que la gente va a poder endulzarse el paladar.
Para esta ocasión han utilizado para una amasada, 10 huevos, una jarra de azúcar, una jarra de aceite, una jarra de anís, dos kilos de harina y 8 sobres dobles de Armisen. Una gran cantidad necesidad para las cientos de rosquillas que elaboran.
Una vez llega el 3 de febrero, colocan las cestas con las cientos de rosquillas en el altar de la Parroquia San Blas junto a otros dulces que la gente coloca para ser bendecidos. Tras la misa, las personas que quieren se acercan a coger las rosquillas bendecidas. "Comenzamos a hacer esto porque veíamos que el 3 de febrero, siendo pleno invierno, de noche y con frío, la gente no acudía a misa. Así que dimos con la idea para hacer más llamativa la celebración".
Desde entonces, así se quedó la iniciativa en la que año tras año reparten ilusión entre los asistentes. También, hay quienes reparten otros dulces como polvorones o llevan otras cosas para regalar.
En la Asociación de Mujeres de Burlada hay por lo menos 90 personas. Durante el año, van realizando actividades o participan en diferentes actos. "Ha venido gente de todo tipo a darnos charlas, por ejemplo, sobre el autobús y cómo utilizarlo correctamente. Hay gente en tacataca que no sabe que tiene unas prioridades", detalla María Luisa.
Incluso, los Traperos de Emaús han acudido para explicarles el tema del reciclaje y todo lo que conlleva. Incluso, realizan pequeñas excursiones a diferentes sitios. "Son todo charlas o actividades que nos ayudan en nuestro día a día. La mayoría somos mujeres mayores y nos resultan muy útiles estas charlas".
No obstante, se enfrentan cada vez más a un problema cuando quieren realizar excursiones. "Ahora piden inscribirse mucho por internet y nosotras no todas lo entendemos. Necesitamos gente más joven que nos ayude con estas cosas, queremos que se apunten también mujeres más jóvenes", concluye.
