- lunes, 04 de agosto de 2025
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Si para ser político hace falta tener un cinismo bastante elevado, para ser un político del nacionalismo vasco lo de ser un cínico en grado superlativo es indispensable. Un político nacionalista vasco tiene unos niveles de cinismo tan potentes que podría poner él solo otro Tesla en órbita.
Que Bildu hable de ‘Apartheid’ sería divertido si no fuera por el sufrimiento que lleva esa amarga historia racial que sufrieron hace bien poco en el sur de África. Un partido que arrastra en sus filas y en sus simpatizantes a los mayores segregadores de Navarra se atreve encima a tildar de facha a quién no piensa como ellos. Una desfachatez más que en realidad nos tomamos como halago quienes sufrimos sus supuestos insultos.