El bar The Diner se traspasa. Es un local que abrió sus puertas hace doce años y ahora busca nuevos gestores, una vez que le llega la edad de jubilación a su dueña Paqui Díaz. Ya le ha puesto fecha tope. Como máximo un año para dejarlo en las mejores manos.
El establecimiento no puede estar situado en mejor sitio. En plena Plaza de los Fueros de Estella, junto a la iglesia de San Juan. Muy cerca de otras tiendas que hemos conocido en esta sección de comercio local, como Tadeo decoración de Esther y Juanjo Calatayud o Sara Kids dedicada a la ropa infantil y de bebé.
Paqui Díaz Sáez y su marido Jacinto Corchero Méndez son un matrimonio alicantino que llegó a trabajar a Estella en 1981. Han hecho su vida en la ciudad del Ega y tienen dos hijos navarros. Abrieron un antiguo bazar y desde hace doce años se hicieron cargo del bar The Diner.
Es un bar restaurante peculiar. Primero por su decoración estilo americano de los años 50 con esa tapicería de color azul claro en las sillas y butacas. Luego, destaca por su comida rápida con un amplio comedor en el primer piso del local.
Tienen menú del día a 13 euros con siete primeros, cuatro segundos y postre, y medio menú a 9 euros. Tienen la cocina abierta todo el día y también sirven platos combinados, hamburguesas, pizzas, sandwichs, ensaladas, raciones y chocolate con churros.
Paqui Díaz Sáez señala el motivo de poner el local en traspaso, como se puede leer en un cartel colocado en la fachada del bar: "Llevo 42 años en Estella y me quiero jubilar. Hemos llegado a los 65 años y ya toca emprender una nueva vida".
"Me gustaría marcharme lo antes posible. Hasta que encontremos alguien que se lo quede. A mí me queda como mucho un año para jubilarme. A ver si sale un buen señor, señora o señorita que se lo quiera quedar".
No hay relevo en la familia: "Mi hija vive en Palma de Mallorca y mi hijo no quiere. Tiene una niña y no quiere nada de hostelería, donde ha trabajado mucho tiempo. No hay manera. La gente joven no está por la labor", indica Paqui.
"Antes del bar yo tenía una tienda tipo bazar y luego los multiprecios. Hace doce años empezamos con el bar en 2012. El bar va bien aunque en invierno es más triste, pero llega la edad de dejarlo", asegura Paqui Díaz.
Lo más característico del bar "es que damos menús, platos combinados, bocadillos, batidos, creps. La verdad que me da mucha pena dejarlo después de tanto tiempo, pero por otro lado con mucha alegría porque me quiero jubilar.
Después de 42 años en la ciudad del Ega la relación es muy cercana: "Conocemos a todo Estella. Los clientes nos dicen a ver que van a hacer ahora sin el bar. Más que una relación entre clientes y trabajadores, somos una pequeña familia"..
No pierden la esperanza de traspasarlo pronto: "Estamos en tratos con gente para que lo coja. Hay mucha gente interesada pero los bancos no dan dinero. La gente de aquí no está interesada porque es duro y la mayoría de los bares los coge la gente de fuera", concluye Paqui Díaz.
