Pedro Huici Goñi tiene 52 años y lleva más de treinta trabajando en el comercio que abrió su padre en la calle Estafeta de Pamplona. Es un negocio familiar dedicado a la enmarcación y venta de cuadros y molduras.
El dueño asegura que cuadros Huici es el más antiguo de Pamplona en el sector. Está situado en la calle Estafeta número 10 de la capital navarra. Muy cerca de otros establecimientos que hemos conocido en esta sección de comercio local, como Cuadros Mendoza que cerró hace unos meses o la nueva tienda Gigantes Platero que abrió para la Navidad.
Pedro Huici es la tercera generación de la familia en la tienda. Su abuelo fue Lucio Huici y su padre Pedro Huici Marco: "Llevo desde los 16 años y tengo 52 así que calcula, desde chaval. La tienda es de toda la vida. La mantengo antigua como estaba en tiempos de mi padre y mi abuelo".
"Tiendas de estas ya van todas desapareciendo y esta es de las pocas que quedan en Pamplona. Ya es centenaria. Mi familia lleva cien años y anteriormente he visto cuadros de 1885 hechos aquí antes de que lo llevara mi abuelo, cuando se llamaba Casa de Oñate, así que imagínate la de años que lleva esto aquí".
Cerró hace pocos meses su vecino cuadros Mendoza: "Me he quedado solo. Es de las pocas tiendas que quedan de enmarcación en Pamplona porque cuando llega la jubilación nadie quiere seguir. Es un trabajo de meter muchas horas, muy sacrificado, muy especializado y la gente no quiere tanta esclavitud. Es muy difícil que lo quieran las nuevas generaciones".
Con la navidades se ha movido algo más el negocio: "Para hacer regalos con láminas o fotografías. No es como hace años. Hace veinte años se trabajaba muchísimo más porque ahora la gente prefiere comprar cuadros hechos"
"Eso que no tienen la misma calidad de moldura, ni de cristal, ni los acabados, que ahora son de aglomerado de peor calidad y no de madera. Aún aguantamos para la gente que quiera más calidad y pueda elegir molduras a su gusto".
Pedro Huici está soltero pero apenas tiene tiempo libre: "No tengo horarios. Cuando tengo trabajo meto diez u once horas diarias y sino hay que estar ocho o nueve horas diarias en la tienda. Aunque hay maquinaria esto es semi artesano. Hay que acabarlo todo a mano y repasar las esquinas a mano. Aquí no hay horarios".
La calle Estafeta es una muy buena zona de tránsito "pero no es como hace años. Desde que llegó la peatonalizaron el comercio ha ido para abajo en caída libre. Las zonas peatonales son de ocio y no de comercio. Cada día, a menos"
"Es zona de bares y cafeterías. Para eso sí viene la gente, pero la gente que va de compras quiere el coche y no se pueden acercar aquí. Esta es la realidad y el que diga lo contrario está equivocado. La gente va con el coche a comprar", afirma Pedro Huici.
En cuanto al descanso en la tienda, asegura: "Las únicas fiestas que tengo yo son las fiestas de San Fermín del 6 al 14 o 15 de julio que no se puede trabajar aquí. Luego los festivos y en Semana Santa. El resto del año estoy abierto de lunes a sábado".
Pedro Huici concluye con un pensamiento pesimista: "Han cerrado varias tiendas en este sector. Poco a poco quedamos cada vez menos. A mi me quedan aún algunos años. Eso espero".
