Facilitar la escolarización, lograr una mejor incorporación del alumnado en desventaja al centro educativo, la promoción del éxito educativo y la prevención del abandono escolar temprano son algunos de los objetivos de las cuatro promotoras escolares que ha incorporado el Ayuntamiento de Pamplona para este curso escolar 2021/22. De esta manera, el Consistorio pamplonés sigue apoyando la colaboración interadministrativa ya que estas cuatro profesionales prestarán atención en 8 colegios y 5 Unidades de Barrio de los Servicios Sociales de Pamplona.
La concejala delegada de Servicios Sociales, Acción Comunitaria y Deporte, María Caballero, ha recibido en su despacho a las cuatro promotoras, una más que las que conformaban el equipo hasta ahora: Sonia Broto, Noemi Gorriti, Kristina Montero y Violeta Silvar. En el encuentro también han participado la directora del área, Olivia Elizari, y la responsable de los Programas de Infancia y Mujer, Pilar Larrauri.
La figura de promotor escolar, de creciente implantación, hace de puente entre los centros educativos y los Servicios Sociales, en coordinación con las Unidades de Barrio, y su labor es valorada muy positivamente en los centros en los que ha desarrollado su actividad. La contratación se realiza en el marco de la convocatoria de ayudas del Departamento de Educación a los Servicios Sociales de Base para la contratación de promotores escolares o mediadores socioculturales que intervengan en los proyectos de inclusión socioeducativa que se desarrollen en centros públicos de enseñanza de la Comunidad Foral de Navarra en el curso 2021/22. El Ayuntamiento presentó cuatro proyectos que recibirán una subvención del 65%.
Las promotoras escolares se ubican en cinco Unidades de Barrio de referencia con los colegios en los que se desarrollan los proyectos y quedan inscritas en el Programa de Infancia de los Servicios Sociales.
Su objetivo fundamental es el fomento de la inclusión socioeducativa del alumnado y sus familias a través del desarrollo de mecanismos que favorezcan el trabajo en red con los colectivos e instituciones de la zona implicados en la inclusión social y educativa y la mejora de la participación educativa de las familias y del alumnado en situación de absentismo escolar, para lograr una inclusión plena. También persigue la creación de un clima de convivencia adecuado en el centro educativo a través de la implementación de diferentes estrategias y metodologías inclusivas y la identificación del alumnado en situaciones de conflicto personal y riesgo social y el diseño e implementación de medidas encaminadas al apoyo de estos casos.
Por último, trabaja para avanzar en la normalización educativa para conseguir tasas más elevadas de éxito escolar; formar e implicar al profesorado y a la comunidad educativa en el diseño, desarrollo y evaluación del proyecto y lograr la colaboración directa entre los centros educativos y los diferentes estamentos municipales.
