El Parlamento de Navarra ha aprobado este jueves, 18 de diciembre de 2025, la reforma fiscal para 2026 en Pamplona, con una rebaja del IRPF para rentas inferiores a 32.000 euros.
La votación ha salido adelante con los votos a favor de PSN, Geroa Bai y Contigo-Zurekin. UPN y EH Bildu se han abstenido, mientras que PPN y Vox han votado en contra.
La reforma fiscal para 2026 ha incluido, como medida central, una rebaja del IRPF para quienes ganen menos de 32.000 euros. Desde el PSN, Ainhoa Unzu ha defendido que la ley “mejora las rentas” de unas 340.000 personas y ha subrayado el aumento del umbral mínimo para la obligación de declarar, de 14.500 a 17.000 euros.
El texto también ha previsto una rebaja del Impuesto de Sociedades del 28 al 25% si las empresas cumplen cuatro condiciones. Entre ellas, ha citado el mantenimiento del empleo, no aplicar expedientes por causas económicas, reducir la siniestralidad laboral y cumplir la legislación de igualdad.
El proyecto ha salido de un acuerdo entre PSN, EH Bildu, Geroa Bai y Contigo-Zurekin. Además, en el pleno del 27 de noviembre, los socios presupuestarios han rechazado las enmiendas a la totalidad presentadas por UPN, PPN y Vox.
Desde UPN, Juan Luis Sánchez de Muniáin ha criticado que las medidas “consolidan” la “desnaturalización” del sistema impositivo propio. También ha acusado al Ejecutivo de usar la potestad tributaria como “una máquina de recaudar”.
En el PSN, Unzu ha calificado la ley de “coherente, equilibrada y responsable” y ha insistido en que es “buena para la mayoría social”. “Ese es el camino de una izquierda responsable”, ha señalado, al defender que se protege a las rentas medias y bajas.
Por parte de EH Bildu, Adolfo Araiz ha advertido de que “estas medidas tributarias no son ningún punto de llegada”. Aun así, ha dicho que hay “elementos” con “valoración positiva” y ha remarcado que la presión fiscal en Navarra “es inferior a la media europea”.
En Geroa Bai, Mikel Asiain ha defendido una fiscalidad en la que cada persona y empresa aporte según su capacidad real. Y ha rechazado las propuestas de la derecha de incrementar deducciones y exenciones “sin un cálculo” del impacto recaudatorio.
En Contigo-Zurekin, Miguel Garrido ha sostenido que la presión fiscal en Navarra ha bajado dos puntos y medio desde 2007. “Explíqueme cuál es el infierno fiscal”, ha lanzado, al pedir “más cuentas y menos cuentos”.
Desde el PPN, Irene Royo ha reconocido “mejoras”, pero ha dicho que la ley ha sido “una oportunidad perdida” para una reforma más “solvente” y “moderada”. Y en el Grupo Mixto (Vox), Emilio Jiménez ha mostrado un “rechazo absoluto” al proyecto, al que ha calificado de “nuevo atraco fiscal”.