Los toros de Cebada Gago han corrido en Pamplona su encierro 30 después de haber dejado 56 corneados en las 29 carreras anteriores.
El tercer encierro de San Fermín 2018 coros de Cebada Gago ha durado 2 minutos y 33 segundos con momentos de mucho peligro, caídas y golpes.
Dos toros de Cebada Gago han caído en la curva de Mercaderes, momento en el que se ha roto por completo la manada. Desde entonces han corrido sueltos hasta la plaza de toros.
Hasta ese momento, el grupo iba hermanado y unido, aunque estirado. Los clásicos derrotes de estos toros en la cuesta de Santo Domingo se han producido, pero sin llegar a alcanzar a ningún mozo.
Ha sido en Mercaderes cuando un cabestro ha arrollado de lleno a dos mozos y uno de los toros ha tropezado con ellos. Uno de los corredores ha quedado inconsciente en el suelo y ha sido trasladado herido con un fuerte traumatismo.
Hay cuatro trasladados hasta centros hospitalarios, uno de ellos con un fuerte golpe en la cabeza que es el mozo de Mercaderes.
Finalmente, tras un rápido paso por Estafeta, otros dos toros de Cebada Gago han resbalado por un pequeño montón en la zona vallada de Telefónica. Por un momento parecía que podían volverse y hacer por los corredores, pero los dos han optado por seguir el camino a la plaza sin mayores complicaciones.
Los dobladores se han tenido que emplear a fondo para llevar hasta los corrales a esos dos últimos cebadas.
El de hoy era el trigésimo encierro de la ganadería de Medina Sidonia desde su debut en Pamplona en 1985. Desde ese momento sólo habían faltado en cinco ocasiones y se han convertido ya en el hierro con más presencias en San Fermín, sólo por detrás de Miura.
En estas presencias habían dejado 56 mozos corneados, aunque en 9 de sus carreras no habían herido a nadie.
Así lo han narrado los compañeros de Radio Nacional de España a través de las ondas:
Colorada y verde
