• viernes, 20 de septiembre de 2024
  • Actualizado 00:00
 
 

SOCIEDAD

El restaurante de un pueblo de Navarra para comer bien y disfrutar de una visita con mucha historia

Esta localidad navarra tiene sus curiosidades y una larga historia a sus espaldas y se encuentra muy cerca de la frontera con La Rioja.

La fachada del café restaurante El Crucero en Corella. elcrucerocorella.com
La fachada del café restaurante El Crucero en Corella. elcrucerocorella.com

Navarra esconde todo tipo de historias y parajes que están esperando ser encontradas. Es difícil conocer a alguien que admita haber recorrido cada rincón de la comunidad foral, pero no es una tarea imposible. Visitar los pueblos y caminar por las rutas boscosas de Navarra te puede llenar de satisfacción, pero a cambio te deja con el estómago vacío y con ganas de gozar de la gastronomía local.

La localidad de Corella, por ejemplo, tiene sus curiosidades y una larga historia a sus espaldas. Este municipio tiene más de 8.500 habitantes y está a 95 km de Pamplona. Es una de las localidades que más cerca está de la frontera con La Rioja, a menos de 10 km de Alfaro. Para llegar hace falta conducir por la carretera NA-6920 sin atravesar La Rioja.

Es el segundo municipio más poblado de la Ribera navarra y el arte barroco se nota en cada rincón. Corella, durante los siglos X y XI, estuvo en disputa entre el ejército musulmán y el cristiano. No fue hasta el año 1119 que el rey Alfonso I el Batallador anunció que Corella había sido conquistada por los cristianos definitivamente.

En 1130, la población fue englobada dentro del fuero de Tudela y como estaba en un lugar fronterizo, se donó un castillo a la villa para protegerla. Además, como Corella queda muy cerca de Alfaro, siempre había disputas entre las dos localidades, muchas veces por el domino del río Alhama.

Por el año 1369, Corella se vuelve independiente de Tudela y se le concede el privilegio de tener alcalde perpetuo, con la obligación de presentar tres candidatos al rey o gobernador. Desgraciadamente, 60 años más tarde, Corella fue saqueada e incendiada por el paso de unas tropas castellanas durante un conflicto con Navarra.

A partir de ese momento tan bajo, Corella fue creciendo gracias a la influencia e inversiones de otros nobles que tenían interés en la localidad. Cuando llegó a los más de 5.000 habitantes, Corella ya era una de las ciudades de Navarra más poblada y rica.

Con tantos acontecimientos, es natural que Corella cuente con muchos monumentos y edificios antiguos. El que más tiempo lleva en pie es la parroquia de San Miguel, la cual ha sido reformada en tantas ocasiones que casi no queda nada original. Cuando se construyó era de estilo gótico, pero con los cambios de estructura pasó a una arquitectura más barroca.

Destaca también la parroquia de Nuestra Señora del Rosario, una iglesia que se empezó a construir en el siglo XVI pero que sufrió un importante cambio de diseño en el siglo XVII. En 1953 se reformó para añadir una torre y una fachada conveniente a la plaza del Mercado.

De entre los edificios civiles, el palacio de Los Sesma o Casa de Las Cadenas es el más importante. Este palacio de estilo barroco se edificó en el siglo XVIII. Su nombre hace referencia a las características cadenas que cuelgan de sus puertas de entrada y por un tiempo sirvió de residencia para el rey Felipe V y su esposa María Luisa de Saboya.

El barroco es uno de los atractivos principales de Corella y numerosas casas están diseñadas bajo este estilo arquitectónico. La Casa Museo Arrese, la Casa de los Escudero o la Casa de los Sopranis son algunos de los edificios que se pueden visitar por la localidad.

Para finalizar esta visita a Corella, hay que llevarse un buen plato de comida a la boca. Uno de los restaurantes más destacados del municipio es El Crucero, localizado en pleno centro de la localidad.

Este restaurante sirve un menú del día por 15 euros que rotando cada cierto tiempo. También ofrecen una carta para comer al mediodía y otra diferente para la hora de la cena. De entre sus platos, los más populares son el cochinillo asado, la ensalada de pulpo, la torrija caramelizada y la dorada.

El Crucero de Corella abre de lunes a jueves de 7.30 horas hasta las 22.30 horas, el viernes de 7.30 horas hasta medianoche, el sábado de 8.30 horas hasta la 1 de la mañana y el domingo de 8.30 horas hasta las 22.30 horas.

¿Tienes una tienda, un bar, un restaurante o un local comercial en Pamplona o alguna localidad de Navarra?

¿Quieres salir en nuestra sección de Comercio Local y que miles de personas conozcan todo lo que ofreces con una noticia y fotografías hechas por profesionales?

Escríbenos a esta dirección y hablaremos contigo para contactar cuando antes: [email protected]


Apóyanos para seguir realizando periodismo independiente.


  • Los comentarios que falten el respeto y que no se ciñan al tema de la noticia, podrán ser eliminados.
  • Cada usuario será el único responsable de sus comentarios.
El restaurante de un pueblo de Navarra para comer bien y disfrutar de una visita con mucha historia