En poco tiempo hemos conocido varios casos fechados en Alemania y todos ellos relacionados de una u otra manera con asuntos de corrupción cuando no de estafa a escala industrial.
Como en el mito de Jano, el dios latino de doble rostro, la Cataluña nacionalista aparece ante la opinión pública nacional con esa imagen bifronte que amontona épica y corrupción en los mismos circuitos informativos.
Irene Lozano tiene un alto concepto de sí misma. Dice haber aceptado la oferta de Pedro Sánchez por lo sugerente del encargo: propuestas de regeneración democrática.
El Gobierno, a través de la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, ha reclamado este miércoles al presidente de la Generalitat, Artur Mas, que no busque "culpables fuera" y que por una vez se haga "directamente responsable" de casos de corrupción que afectan a su formación como el de las posibles mordidas del 3 por ciento recibidas por empresas.