- sábado, 10 de mayo de 2025
- Actualizado 16:38
Una iniciativa parlamentaria 'croqueta', ya sea Ley o Moción, es aquella que se va paseando de parlamento autonómico en parlamento autonómico, viene de algún ayuntamiento de España o incluso se captura del extranjero. Para ser una 'croqueta' auténtica debe estar redactada (copiada) literal, y eso pasa con mucha frecuencia en el Parlamento de Navarra.
Cruce de declaraciones entre la consejera de Relaciones Ciudadanas e Institucionales, Ana Ollo, y la portavoz parlamentaria del PPN, Ana Beltrán, en una comisión para explicar la convocatoria 2016 de ayudas del Gobierno de Navarra para realizar actividades en materia de paz y convivencia.
Lo que está ocurriendo en la política española, al borde ya de la semana de la (no) investidura de Mariano Rajoy, es, simplemente, de no creer. Imposible ofrecer un espectáculo más completo de incompetencia, mala baba, rencillas cuarteleras y desdén por el pobre contribuyente/votante, que somos usted, yo y unos cuantos millones de españoles más.
Cierto que el Parlamento español ha quedado en los últimos siete meses para lo que ha quedado: para que los líderes políticos se reúnan en algún salón 'privado' para, llegan a decir, negociar tranquilamente, lejos de los oídos indiscretos de los periodistas que son la conexión con los ciudadanos, y para, luego, ofrecer la versión pactada de sus encuentros a esos mismos periodistas, que se agolpan en la misma incómoda sala de prensa para escuchar más o menos lo mismo que ya llevan meses escuchando.