reforma fiscal

El sindicato abertzale se ha manifestado en Pamplona para reclamar una reforma fiscal en Navarra.

La coalición ha anunciado que presentará tres enmiendas a la totalidad a los tres proyectos de ley con medidas fiscales propuestos por el Gobierno foral.

Tanto Podemos como I-E han anunciado que votarán en contra de una de las primera medidas fiscales propuestas por el Gobierno foral.

Un total de 37.304 empresas ejercían su actividad en Navarra a comienzos de 2018. 

El consejero Aramburu defiende que la reforma del cuatripartito ha cumplido los objetivos de "eficacia, progresividad y equidad".

La encuesta fue respondida por más de 250 empresas, una cifra que es considerada como representativa del empresariado total navarro.

Es el dinero que acumulan entre la presidenta y cinco consejeros, pero ellos se libran de sus propias medidas fiscales que aplicarán a los demás.

El PPN plantea suprimir el artículo que elimina las deducciones por ahorro y las nuevas tablas respecto a las deducciones por planes de pensiones.

La deflactación de la tarifa, el aumento de las deducciones por hijo o la conservación de la deducción por vivienda, son algunas de las medidas.

El consejero ha criticado que "la falsa promesa de la derecha es que bajará los impuestos, pero luego no lo hace, y cuando lo hace aplica recortes".

Izquierda-Ezkerra destaca los cambios como un "sistema con más progresividad y con más eficiencia recaudatoria".

El Comité Ejecutivo ha denunciado que "supone la tercera subida de los impuestos globales a empresas y ciudadanos en esta legislatura".

La oposición ha sostenido que ninguno de los grupos que sustentan el Gobierno de Barkos ven con buenos ojos los nuevos impuestos para Navarra.

Beltrán ha añadido que las medidas tienen un "efecto cosmético" porque no lograr reparar el "daño" causado a los navarros con la anterior reforma fiscal.

Geroa Bai, Bildu, Podemos e Izquierda Ezkerra vuelven a cerrarse en un tema que ha perjudicado a muchos ciudadanos de Navarra.

Llegada una nueva reforma fiscal al Parlamento de Navarra, resulta que a ninguno de los miembros del cuatripartito que gobierna Navarra -y que ha traído esta reforma- les gusta ¿Entonces? ¿Para qué la traen? Es el vivo ejemplo de la parálisis que sufre una administración cuándo hay que contentar a tanta gente y tan diversa, que al final no se contenta a nadie y lo pagan los de siempre.

Según ha insistido, la propuesta del Gobierno "ha de tener vida en el Parlamento en las próximas semanas".

Los regionalistas apuestan por deducciones para familias con 3 o más hijos o en caso de pagos a centros infantiles.

Se incluyen el incremento de la deducción por hijo en el IRPF hasta los tres años y se declaran exentas las donaciones directas hasta los 250.000 euros.

Destaca sobre todo la subida de un 14,7% de los impuestos directos, además del IRPF y el impuesto del Patrimonio.

El departamento de Hacienda y Política Tributaria ha comunicado que "impulsará" las modificaciones legales del IRPF que se consideren "necesarias".
 

El texto planteaba remitir a la Cámara un proyecto de ley foral en el que "se asegure una rebaja efectiva de la presión fiscal a las familias navarras".

La portavoz Solana ha asegurado que "va a escuchar otro tipo de propuestas que puedan tener formaciones como las que componen el cuatripartito".

Para el consejero, el "principal" reto de la Comunidad foral es cerrar con el Estado el acuerdo sobre el Convenio Económico.

El PPN dice que las clases medias son las grandes perjudicadas de la nueva fiscalidad navarra, mientras el consejero Aranburu cree que "no es sangrante".

El portavoz de UPN ha recriminado a Barkos que hay familias que están esperando la declaración para saber si "llegan a final de mes". 

Además, ha reclamado "unos presupuestos cuyos ingresos se apoyen más en mecanismos que generen crecimiento económico y competitividad".

Hacienda ha devuelto en esta campaña del IRPF unos 25 millones menos de lo que preveía en el pasado mes de abril.

Han promovido una campaña para denunciar una situación "poco favorable" a la que están sometidas desde enero de 2015.

Ana Beltrán emplazará al consejero de Hacienda a explicar si, a su juicio, es cierto que la reforma fiscal sólo ha afectado a las rentas altas.

Finalmente, con el único apoyo de los grupos que apoyan al Gobierno Cuatripartito, ha sido aprobada una reforma fiscal que ha sido ampliamente rebatida, no solo por los grupos de la oposición al actual Gobierno de Navarra, sino por un amplio elenco de representantes de la sociedad civil de diferentes posiciones y sensibilidades (organizaciones empresariales, sindicales, sectoriales,….etc.).

El cuatripartito aprueba la reforma fiscal pese a que ningún grupo parlamentario se ha mostrado plenamente satisfecho con ella.

El consejero Aranburu ha insistido en la UPNA en que las rentas bajas se verán beneficiadas respecto al año 2015.

Civismo ha denunciado que supondrá una subida de impuestos para el trabajador medio de más de 180 euros al año.

La reforma fiscal modifica varios impuestos directos, fundamentalmente IRPF, Patrimonio, Sociedades y el Impuesto especial de Hidrocarburos.

José Antonio Sarría ha afirmado que Navarra "se va a quedar como la Comunidad que más impuestos paga".

Los candidatos de UPN-PP han mantenidos una reunión con el comité ejecutivo de la Confederación de Empresarios de Navarra

La portavoz del PSN reafirma que todos los navarros que ganan más de esa cantidad pagarán más con la reforma del Gobierno de Barkos.

El presidente del Senado se muestra contrario a la reforma fiscal que propone el Ejecutivo de Uxue Barkos. 

El director de la Oficina Económica de Moncloa cree que el nivel de presión fiscal en Navarra tiene que ser equivalente al del resto.

El consejero de Hacienda y Política Económica del Gobierno de Navarra responde a los críticos con la reforma fiscal.

También ha debatido sobre la convocatoria de concursos para designar jefes de negociado, que se podría poner en marcha en dos años.

La dirección considera que "el conjunto de medidas propuestas afectará de forma muy negativa a nuestros ciudadanos y empresas".

El partido no acepta la totalidad del proyecto por lo que presentará enmiendas parciales para ser "constructivos". 

Los regionalistas consideran que la propuesta es "un castigo brutal" y que va a dejar a Navarra con "la peor fiscalidad de España".

La reforma fiscal modifica varios impuestos directos y que el Ejecutivo estima que elevará la recaudación en 127 millones en dos años.

El cuatripartito, por su parte, defiende que va a "mejorar" los ingresos para "reforzar la inversión social".

Así lo cree el PSN, que critica que casi 37.000 navarros con rentas entre 12.000 y 18.000 euros pagarán más impuestos con la reforma. 

Han destacado "Y especialmente que la patronal pague impuestos a la altura de la riqueza que está acumulando".

Exige al Ejecutivo el compromiso de que los navarros y navarras no pagarán ni un céntimo más que en cualquier otra comunidad.