Las hermanas Ana y Yolanda Ustárroz han abierto hace muy poco la tienda 'Esencia infinita', que está situada en la calle Iñigo Arista 9, bajo, en el barrio de Iturrama en Pamplona.
Es un establecimiento que está muy cerca de otros locales que hemos conocido en este apartado de comercio local en la capital navarra, como es el caso de la curiosa tienda de cómics de José Miguel García, o el taller de reparación de vehículos Autorrama.
'Esencia infinita' es una tienda multimarca de ropa de mujer "Made in Spain" a precios medios, y que también hacen servicios de asesoría de imagen y personal shopper UNISEX. Ana y Yolanda Ustárroz aseguran que todas las marcas son de calidad, versátiles y duraderas a precios asequibles de diferentes estilos.
Las propietarias del local son naturales de Oronoz Mugaire (Valle Baztán). Ana explica a Navarra.com: "Somos unas habituales en el barrio desde que estudiábamos. Mi hermana cogió una Tahona siete o ocho años junto a la ikastola Amaiur y allí estuvimos trabajando las dos", señala Ana.
La pandemia fue dura también para ellas: "Fue el detonante para replantearnos todo y nos preguntamos si nos veíamos de aquí a unos años jubilándonos a este ritmo, y dejamos la Tahona".
"Siempre habíamos pensado tener una tienda de ropa porque nuestra madre María Jesús había sido modista y nuestro padre (Jesús Mari) era panadero", ha explicado Ana Ustárroz.
Cuentan como su madre siempre hacía sus cosas en casa con una maquina de coser. En su memoria, se lanzaron a hacer varios cursos y master de asesoría de imagen. "Sobre todo, nos dimos una vuelta para ver el tipo de ropa que se vende en Pamplona".
"Algunas mujeres vestían diferente y nos decían que compraban ropa en San Sebastián, Bilbao, o en Vitoria y nos dimos cuenta que en Pamplona todo el mundo viste igual con las mismas marcas", señala Ana Ustárroz.
En Pamplona, "o era una ropa muy barata de procedencia oriental o te tienes que ir a una boutique. No había de tiendas de precio medio con cosas diferentes, Vimos que ahí había un nicho bastante importante. Además, vas a las tiendas y no hay un asesoramiento personalizado".
Abrieron en el mes de octubre de 2022: "Estuvimos un año formándonos. Le dimos muchas vueltas a darle forma a la tienda con la asociación ANEL, que nos ayudaron mucho. Estamos contentas. La gente se queda muy sorprendida por las marcas, el tipo de ropa que hay, y por la calidad-precio que tiene", indica Ana.
En cuanto a la asesoría personal, lo explican así: "Según el cuerpo que tiene le decimos o aconsejamos las zonas que debe potenciar y las que debe neutralizar para que su silueta quede lo más cercana posible a la silueta del reloj de arena, que es la ideal. Le vendemos la falda que mejor le siente, no cualquiera y eso es un añadido", comenta Yolanda Ustárroz.
Tienen otras particularidades: "Traemos muy pocas unidades. Todo es 'made in spain' con un asesoramiento personalizado y servicios de colorimetría, fondo de armario, análisis de imagen y estilismo en el vestir, de visagismo, personal shopper... Creo que somos una tienda diferente en este sentido".
Disponen de diferentes estilos de ropa "como vaqueros sostenibles sin gastar lo que cuesta un Levis por setenta euros y están saliendo como churros. Pretendemos que la gente sepa qué cosas le sientan bien".
El cuerpo es como un lienzo y según los acabados y colores puede quedar mejor. "Después de nuestros consejos tu vas a las tiendas sabiendo lo que te sienta bien y eso repercute en el bolsillo porque vas a comprar de manera sostenible e inteligente. Debe ser un consumo consciente y no comprar por impulsos", comenta Yolanda Ustárroz.
En cuanto a los precios, aseguran que son intermedios: "Lo más caro que puedes encontrar aquí es un abrigo de paño por 140 euros. El resto, un vestido largo por 90 o 100 euros, un vestido corto 70, un vaquero sostenible 70 euros. Están hechos en España con mano de obra en buenas condiciones, que eso también es sostenible", explica Ana Ustárroz.
La respuesta de los clientes es muy positiva: "La gente nos dice que van a volver. Un chico hoy mismo se ha gastado 200 euros en un regalo para su novia y se ha marchado feliz y encantado", señala Ana.
"Nos ha enseñado la foto de su novia. Hemos visto la armonía que tenía en función del pelo, los ojos, y se ha llevado varias prendas. Tenemos una clientela que ha vuelto varias veces. Creo que estamos haciendo las cosas bien".
