El centrocampista pamplonés jugó nueve temporadas en el club asturiano, antes de jugar en Osasuna y ascender a Primera división.
Clemente Iriarte Madariaga (Pamplona, 25 de julio de 1946), conocido futbolísticamente como Iriarte, recibió este sábado el homenaje del Real Oviedo, en el que jugó nueve temporadas y durante las cuales fue uno de los pilares del equipo.
El presidente del Real Oviedo, Jorge Menéndez Vallina, le hizo entrega de una foto enmarcada en la que se ve a Iriarte defendiendo la camiseta azul en el estadio Carlos Tartiere de Buenavista en la década de los setenta.
Iriarte llegó al Real Oviedo en 1969 procedente del Burgos y jugó en el conjunto carbayón hasta 1978, período en el cual destacó como un gran centrocampista, se convirtió en uno de los pilares fundamentales del equipo y fue uno de los jugadores más admirados por el oviedismo.
A su depurada técnica, unía una total entrega, lo que hacía de él un jugador que ofrecía un gran rendimiento temporada tras temporada. Asimismo, hacía gala de una exquisita deportividad.
Iriarte fichó por Osasuna en la campaña 1978-79 y al año siguiente ascendió a Primera división con Pepe Alzate en el banquillo navarro. Era uno de los fijos en el centro del campo. Un jugador de enorme clase y calidad que dejó huella entre los aficionados.
