POLÍTICA
El Gobierno de Chivite vuelve a regar un año más con miles de euros un chiringuito de fomento del euskera
La inversión se enmarca en el acuerdo entre Euskarabidea, el Instituto Navarro del Euskera y la Sociedad de Estudios Vascos.

El Gobierno de Navarra ha firmado este miércoles un nuevo convenio con la Sociedad de Estudios Vascos (Eusko Ikaskuntza) para impulsar el uso del euskera en Navarra y fomentar su papel como elemento de convivencia. Lo ha hecho con un presupuesto de 60.000 euros y en un acto institucional que ha contado con la vicepresidenta segunda, Ana Ollo, como anfitriona en el Palacio de Navarra.
La inversión se enmarca en el acuerdo entre Euskarabidea, el Instituto Navarro del Euskera, y la citada entidad, fundada hace más de un siglo por las diputaciones de Navarra, Álava, Bizkaia y Gipuzkoa. La finalidad, según han explicado, es “dar continuidad a las actividades de estudio, investigación y promoción del euskera” desde una mirada que combine valores culturales, identidad vasca y convivencia intercultural.
La nota institucional habla de una colaboración “estrecha y fructífera” desde 1918, pero no menciona ningún resultado concreto de evaluaciones anteriores ni el impacto real de las acciones financiadas. Tampoco se han detallado los mecanismos de seguimiento de este nuevo convenio, más allá del enunciado general de los dos proyectos que ampara.
Uno de ellos se titula ‘EzBerdin Berdinak’, una iniciativa de carácter artístico centrada en los valores del euskera y su transmisión como elemento de identidad vasca. La propuesta incluye la organización de un espectáculo escénico y una posterior dinámica de debate sobre cultura e identidades, cuyas conclusiones se recogerán en un informe.
El segundo proyecto, ‘Puentes para la convivencia en Navarra’, busca fomentar el aprendizaje del euskera entre personas inmigrantes. Para ello, se realizará un trabajo de campo sobre actitudes hacia el idioma y la cultura navarra, y se propondrán acciones que, según el Gobierno, potencien un modelo de integración “desde la diversidad”.
Sin embargo, el Gobierno foral no ha aclarado cuántos inmigrantes participan actualmente en los programas de euskera, ni cuál es el coste total de las actividades culturales frente al impacto real en el uso social del idioma. Tampoco ha detallado cómo se medirá la eficacia del enfoque intercultural anunciado.
El acto ha contado también con la presencia del director gerente de Euskarabidea, Javier Arakama, y las representantes de Eusko Ikaskuntza en Navarra, Isabel Elizalde y Elorri Arkotxa. Con esta firma, el Ejecutivo insiste en situar el euskera como “valor cultural central” en Navarra, aunque sigue sin aclarar cómo conjugará esa apuesta con la realidad sociolingüística de una comunidad en la que el uso habitual del idioma sigue siendo minoritario.