La Comisión de Interior del Congreso de los Diputados ha aprobado este miércoles una moción presentada por UPN en la que se condenan los sabotajes y actos coercitivos que se están produciendo durante los trabajos de catas geológicas en la Sierra de Aralar, previos a la decisión sobre el trazado que conectará el Corredor Navarro de Alta Velocidad con la Y vasca.
El texto aprobado también insta a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado a actuar contra los autores de estos actos, al tiempo que solicita a las autoridades responsables que garanticen la seguridad de los trabajadores y eviten cualquier retraso en el desarrollo de las obras.
La moción ha salido adelante con el apoyo de PP y Vox, mientras que han votado en contra el PSOE, EH Bildu y el resto de partidos, y el PNV se ha abstenido.
El diputado de UPN, Alberto Catalán, ha lamentado que los socialistas “no condenen los sabotajes” y ha señalado que la oposición de la izquierda abertzale al Tren de Alta Velocidad “no es nueva”. Según ha dicho, "es la izquierda radical vasca, con Bildu a la cabeza, los socios más fieles del PSOE en Navarra y Madrid, los que se oponen y ralentizan la construcción de esta infraestructura".
Catalán ha denunciado que “las Coordinadoras del NO siguen siendo una triste realidad en Navarra” y ha reclamado que estos actos no queden impunes: "No puede quedar impune que cada vez que se plantea una infraestructura de futuro para Navarra los de siempre se coordinen para boicotearla".
El parlamentario navarro ha concluido recordando que “hay instrumentos legales y democráticos para posicionarse”, pero que “el boicot, la presión, el amedrentamiento y la intimidación son inadmisibles”. “Desde las formaciones políticas que representan a la mayoría de la sociedad no podemos justificar ni callar ante este tipo de comportamientos”, ha rematado.