La productora
Animaset ha finalizado el rodaje de la película-documental sobre
San Ignacio de Loyola que se estrenará en Manresa (Barcelona) en
2022 con motivo de los 500 años de su estancia en esta ciudad catalana.
Según ha informado el portal de información religiosa Catalunya
Religió.cat, el documental se basa en la recreación del recorrido que han hecho
cuatro peregrinos haciendo lo mismo que hizo San Ignacio cuando salió de su casa, en Loyola, en febrero de 1522, hasta llegar a Manresa el 25 de marzo de 1522.
Los cuatro peregrinos han hecho este camino junto a un guía y con las cámaras de la productora Animaset, que les ha seguido por
Euskadi, pasando por
Navarra,
La Rioja,
Aragón y hasta llegar a
Cataluña.
"Hoy estamos caminando, 500 años más tarde, porque
San Ignacio dio el primer paso", ha explicado a Catalunya Religió.cat el jesuita Josep Lluís Iriberri, director del Camino Ignaciano, que ha hecho de guía del grupo.
La película es una iniciativa de la
Oficina del Peregrino y se harán dos versiones, una cinematográfica de hora y media de duración y otra de 50 minutos para televisión.
La idea, según sus promotores, es que se pueda visionar en todas las poblaciones por donde pasa el camino y
que se proyecte en todo el mundo con la colaboración de la Compañía de Jesús y de la administración pública.
El proyecto de película-documental sobre el Camino Ignaciano comenzó en
2020, cuando
Iriberri recibió el encargo de los responsables de los
Jesuitas, que están promocionando este camino entre
Loyola y
Manresa inspirándose en otros modelos, como el del
Camino de Santiago.
El documental sigue la autobiografía de San Ignacio y sus ejercicios espirituales y "toma Ignacio de Loyola como un modelo de persona que se pone en camino, que decide un
cambio de vida radical", según Iriberri.
"Este cambio de vida hace 500 años le cambió no solo a él, sino que nos dejó un
legado a todos los que hemos venido detrás", ha añadido el jesuita.
El director de Animaset,
Jordi Roigé, ha explicado que "todos los rincones por donde pasa el Camino Ignaciano invitan a hacer una experiencia cultural y de naturaleza y también más interior, de
conversión del espíritu".
El documental aprovecha el recorrido de los peregrinos para descubrir la
cultura y el
arte religioso que hay en pueblos y ciudades, "a veces un poco escondidos", apunta Iriberri.
Roigé ha definido el rodaje como "
una experiencia extraordinaria" y "
profesionalmente compleja", por las muchas localizaciones, ya que las jornadas de grabación han sido muy largas, con "rodajes que empezaban a las 07.30 y que a veces terminaban a las 22.00 horas".
El equipo de rodaje ya está en Manresa, una ciudad que ofrece 22 lugares ignacianos para visitar, desde el pozo de la luz, lugar de iluminación, a la sede adonde acudía San Ignacio a oír misa y confesarse, hasta el santuario del Rapto y la Cueva donde vivió.