El colegio Irabia-Izaga de Pamplona ha hecho un llamamiento a las familias para extremar la prudencia y el cumplimiento de las normas de tráfico en las horas de entrada y salida del alumnado. La situación, reconocen desde el centro, se ha visto agravada por las obras que desde hace casi tres años afectan al barrio.
Las intervenciones urbanísticas comenzaron con la construcción del vial de la calle Privilegio de la Unión y la urbanización de Chantrea Sur, a las que se sumaron el acondicionamiento de los aparcamientos en superficie de la calle Ezcaba y, más recientemente, las obras de reurbanización de las calles Artajona, Cáseda, Cintruénigo, Echalar, Echarri Aranaz, Travesía de Espronceda, Ezcaba y San Cristóbal, además de las plazas del Reloj y del Euskera.
Estos trabajos han provocado grandes atascos en la zona en las horas punta de entrada y salida del colegio, especialmente entre las 8:30 y las 9:00 horas por las mañanas y de 16:30 a 17:00 por las tardes, generando situaciones de incomodidad y riesgo tanto para las familias del centro como para los vecinos del barrio.
Bajo el lema “Que crezcáis juntos”, el colegio ha querido extender su compromiso con el civismo y la convivencia también al entorno urbano, en el que lleva casi sesenta años integrado. “Vosotros sois los mejores embajadores del espíritu de civismo y concordia que se desprende de nuestra misión”, han señalado desde la dirección en una comunicación a las familias.
Por este motivo, el centro ha pedido intensificar el esfuerzo en el cumplimiento de las normas de tráfico y ha recordado varios puntos importantes: los estacionamientos de tierra junto a la calle Etxarri Aranaz y el aparcamiento disuasorio de Infantil son de uso exclusivo de los vecinos mientras duren las obras. La Policía Municipal ha advertido que su uso indebido puede conllevar sanciones.
Además, se recomienda evitar aparcar sobre las aceras, hacerlo en doble fila o bloquear los accesos peatonales y viviendas del entorno. También se pide no detener los vehículos en la rotonda ni frente a la puerta principal del colegio, así como no acceder en coche al recinto mientras salen los alumnos.
El centro recuerda que existe una zona blanca de 300 metros en dirección a Jesuitinas, ideal para las familias con hijos mayores, permitiendo así que las de Infantil puedan estacionar más cerca de su edificio.
Aunque la solución definitiva no depende del colegio, la dirección ha asegurado que mantiene contacto con la Policía Municipal de Pamplona para estudiar medidas que mejoren los accesos y la seguridad tanto de las familias como de los vecinos.
Paralelamente, el colegio ha trasladado a la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona la necesidad de reforzar la capacidad del transporte público en las horas punta. Además, continúan educando a los alumnos en valores de respeto y cortesía en los medios públicos, con el objetivo de que sean ejemplo de convivencia.
