La plantilla de la Policía Municipal de Tafalla ha registrado una petición formal para solicitar la dimisión del jefe del cuerpo, Iván Colás Azkarate, según un escrito remitido en las últimas horas.
Los agentes han explicado que esta petición ya se ha trasladado al Ayuntamiento de Tafalla tras, según señalan, más de un año de conflicto interno. En ese sentido, han recordado que ya se ha pedido en otras ocasiones el cese por la “situación insostenible” al alcalde, Xabier Alcuaz (EH Bildu), peticiones que han sido ignoradas.
La situación no ha mejorado, según el mismo comunicado, y la plantilla ha denunciado la apertura de expedientes disciplinarios “sin motivo” a varios policías. En tres de esos casos, han asegurado que los tribunales ya han revisado las sanciones: uno de los recursos se ha estimado por completo y los otros dos se han rebajado a simples apercibimientos.
El escrito también ha puesto el foco en la falta de personal y de recursos en el cuerpo. Según el comunicado, en la última semana se ha amortizado una nueva plaza de Policía Municipal, que se ha sumado a otra plaza amortizada el año pasado, con una carencia de medios que califican de “abrumadora”.
Además, los agentes han señalado que la denegación de derechos y permisos se viene repitiendo “de manera constante”, afectando a la conciliación y al funcionamiento ordinario del servicio.
En la solicitud de dimisión, firmada por “los agentes abajo firmantes”, la plantilla ha afirmado que se ha producido una “retirada constante sin justificación” de derechos laborales, con “pérdida retributiva” y problemas de conciliación familiar.
Ese mismo documento ha descrito un “ambiente laboral tenso” y un “sentimiento generalizado de desmotivación”, con un “deterioro significativo en la moral de los trabajadores”.
Los policías también han denunciado “comportamientos y decisiones arbitrarias”, además de “órdenes verbales dictadas durante el servicio contrarias a la Ley”, y han vinculado ese escenario a los expedientes disciplinarios abiertos.
Según el texto registrado, todo ello ha generado una “total y absoluta falta de confianza” en la dirección del cuerpo, lo que, a su juicio, ha ido más allá del malestar interno.
En otro de los párrafos, la plantilla ha advertido de la dificultad para el desarrollo profesional y para ejecutar con eficacia las tareas policiales. También ha defendido que la situación afecta al “correcto servicio al ciudadano” y ha hablado de una “crisis de confianza insostenible”.
Por todo ello, los agentes han pedido un “cambio urgente de dirección” y han reclamado que el jefe “presente su dimisión de manera inmediata”, “anteponiendo el bienestar laboral” del cuerpo “por encima de cualquier interés personal”. La entrada y registro del escrito se realizó este martes, 23 de diciembre de 2025, según el comunicado remitido a los medios de comunicación.